El Instituto Superior de Estudios Sicopedagógicos y Sociales comenzó con su ciclo lectivo, con palabras a cargo del representante legal, Miguel Di Pego y de la docente Silvina Carlucche, quien leyó las palabras de la doctora Vilma Pruzzo, creadora de la institución.
Estudiantes, directivos, profesores, personal administrativo, padres e invitados especiales asistieron al acto de apertura de ciclo 2018 y se informó que aún se mantiene abierta la inscripción para las diferentes carreras: Asistente Social, con modalidad presencial y a distancia, Psicopedagogía y Profesorado en Psicología, en la sede de Santa Rosa y en General Pico, Asistente Social con modalidad presencial.
Vilma Pruzzo recordó en su discurso los inicios de la institución, hace ya 25 años: “En ese tiempo teníamos muy vigente la dirección que el maestro Paulo Freire había marcado a nuestro derrotero pedagógico. Nos había sacudido con su teoría y más aún con su práctica inserta en comunidades desvalidas, acompañando a los oprimidos, los sin tierra, sin viviendas, sin trabajo, para ayudar a recuperar la dignidad de la palabra y ejercitar la más dura de las batallas pacifistas: luchar con la palabra para conquistar los derechos vulnerados”.
Y agregó: “Para eso, Freire pensó en la educación popular que llevaríamos a cabo no sólo maestros y profesores, sino todos aquellos que pudieran acompañar las necesidades de nuestros pueblos y ayudarles a conquistar la ‘palabra’ el bien menos equitativamente distribuido. Y esa pedagogía de la indignación que caracterizó su crítica a los sistemas dominantes se transformó en una pedagogía de los sueños posibles, es decir una pedagogía concebida como arte de hacer posible lo imposible y que nos señala el derecho y el deber de cambiar el mundo”.
“Y muchos de nosotros decidimos que era posible soñar un mundo mejor porque no hay historia sin innovación, cambio y creatividad y sin libertad para luchar por esos cambios. Y a la vez, tenemos claro que el ejercicio de la libertad implica riesgos… no es fácil ni gratuito pensar los cambios que la sociedad necesita. Como profesionales, vamos a transitar el sufrimiento de los niños que no aprenden porque pensamos su futuro de exclusión del mundo del trabajo y que será la exclusión de la lucha por mejores condiciones de vida. Y ya los vemos hundirse con la autoestima hecha pedazos que los invalida para la lucha y la rebeldía”, remarcó Vilma Pruzzo.
“En ese momento, como psicopedagogos deberemos asumir el riesgo de la denuncia de un sistema de exclusión pero con la necesaria creatividad para anunciar el posible camino hacia la mejora. Y como profesionales de la psicología y el servicio social, van a transitar el dolor de la violencia de todo tipo, de la desprotección de nuestros niños y jóvenes frente a la miseria, la droga, la exclusión. Y podemos asumir el riesgo de la denuncia y a la vez que pensemos el anuncio de lo posible. Porque como educadores populares podemos denunciar la violencia del embarazo adolescente y a la vez arriesgarnos a brindar la educación sexual garantizada desde nuestra Ley de Educación y no silenciar las cuestiones de prevención de una natalidad no deseada por falsos prejuicios sociales”, sostuvo la docente.
Vilma Pruzzo concluyó: “Y a ustedes futuros profesores, asistentes sociales, psicopedagogos, los insto a que ante las miserias del presente pensemos el boceto del mundo en el que nos gustaría vivir, es decir pensemos la utopías de soñar posible el mundo que soñamos en nuestros sueños. Gracias a todos ustedes, mis graduados, nuestros profesores y nuestros jóvenes porque nos alientan a ver el presente para proyectarnos hacia un futuro mejor, a imaginar una pedagogía de los sueños posible”.