El grupo de madres, en su mayoría solteras y con hijos, que esta mañana montó dos carpas frente al Instituto Provincial Autárquico de Vivienda en reclamo de casas, levantó la medida de protesta después de reunirse con el gerente de Adjudicación, Rogelio Schanton. No consiguieron que las incluyan en los listados de futuros adjudicatarios.
«De acá no nos movemos hasta que no nos digan que estamos en la lista de adjudicatarios», dijo por la maána la vocera del grupo, Fany Velázquez. Por la tarde las recibió Schanton y les dijo que por el momento no tienen soluciones a su reclamo.
Las mujeres fueron al Ipav con redoblantes y dos carpas, que armaron en el ingreso al organismo. ¿Qué reclaman? Que las incluyan en el listado de adjudicatarios de casas porque no pueden pagar un alquiler y viven en muchos casos en lugares deplorables.
«Somos entre 10 y 15 madres que estamos sin casa, alquilando, y no podemos más. Hasta el momento no nos dieron nada, solamente le llevaron una cama cucheta a una mamá, que no es lo que precisa», dijo Veláquez.
«Estamos reclamando una casa, no mercadería y una cama cucheta. La semana pasada se lo pedimos por nota el gobernador Carlos Verna y al vicegobernador. El gerente del Ipav, (Rogelio) Schanton, nos dice que no pueden darnos porque hay otros esperando y con problemas como nosotros, con chicos con discapacidad. Pero nosotras también tenemos hijos y con problemáticas respiratorias, por lo tanto exigimos que nos metan en los listados de mil casas», dijo.
La semana pasada, en la nota que le enviaron a Verna, plantearon que están pasando por una situación difícil, ya que la mayoría son madres solteras y deben afrontar un alquiler de entre 8 y 10 mil pesos por mes. Encima, no las aceptan con hijos.
Pero eso no es todo: en el mejor de los casos consiguen lugares muy precarios, con humedad en las paredes y poca calefacción. Esto genera consecuencias a los hijos que tienen problemas respiratorios.
«Muchas hace entre 9 y 10 años que estamos anotadas en el Ipav y ahora llegamos a una situación muy difícil porque no tenemos trabajo fijo”, agregó Veláquez.