El senador nacional Juan Carlos Marino (UCR La Pampa), como se preveía, votó en contra del proyecto de interrupción voluntaria del embarazo. No habló en la histórica sesión, donde se rechazó el aborto legal, pero luego dialogó con la prensa acreditada del Senado sobre el resultado de la votación: dijo que el rechazo de la Cámara Alta al proyecto proveniente de Diputados que legalizaba el aborto demuestra que el debate no está totalmente saldado en la sociedad; deslizó críticas a la conducción partidaria por las presiones que sufrieron los senadores que no votaron la legalización; y consideró importante evaluar la posibilidad de convocar a una consulta popular.
Marino, inicialmente, se había mostrado en contra del proyecto. Luego dijo que evaluaría su posición, lo que alentó expectativas en el sector que pedía por el derecho de las mujeres. Sin embargo, hace unos días dijo que votaría por el «no», lo que le valió cuestionamientos hasta de dirigentes de su propio partido.
En la madrugada de este jueves, luego de la votación, dialogó con la prensa. “Más allá del rechazo del Senado a un proyecto de ley claramente no era el adecuado, hay que destacar que es muy positivo que iniciemos una etapa de discusión y debate que debe ser respetuoso, serio y se debe hacer buscando todos los consensos que un tema de esta naturaleza merece”, dijo.
“La discusión no debe ser solamente aborto sí o aborto no. Lo único que logramos ciñendo el debate a eso es agregar una nueva grieta a la sociedad. Necesitamos un debate más integral y profundo, que permita a toda la sociedad expresarse y no sólo a los colectivos movilizados”, dijo.
También deslizó la posibilidad de realizar una consulta popular sobre el tema. “Es una posibilidad a futuro, no lo descarto», dijo al ser consultado por la prensa. «En un tema como este hay que escuchar a toda la sociedad porque claramente no hay postura unánime. Eso fue lo que intenté hacer a la hora de definir mi voto. Escuchar a todos, tener cientos de charlas y audiencias con la sociedad pampeana; pero entiendo que cada provincia tiene una idiosincrasia diferente y todos tienen derecho a expresarse”.
En relación a las características del debate resaltó que, si bien se dio en un marco de respeto general, hubo quienes se dedicaron a denostar a quienes opinaban diferente. “Vivimos en democracia y necesitamos aprender a respetar a quien puede opinar diferente y eso no te convierte ni en retrogrado ni en asesino”, aseveró.
En ese sentido, deslizó una crítica hacia la dirigencia del radicalismo nacional. “Más que nada por los ataques que, de los propios correligionarios, recibimos quienes no acompañamos el proyecto de despenalización», dijo. «Este voto no me convierte en peronista ni del PRO ni de otro partido. Voté como radical, escuchando a toda la sociedad pampeana. Algunos dirigentes de la Unión Cívica Radical parece que se olvidaron de que el partido es sinónimo de democracia y de las enseñanzas de Raúl Alfonsín quien respetaba las libertades de conciencia en casos controvertidos como este. Reitero, necesitamos escuchar más y respetar todas las posturas”, finalizó.