Una joven de 30 años del distrito bonaerense de Pilar falleció este lunes en el Hospital Juan C. Sanguinetti. Fue a consecuencia de las complicaciones provocadas por un aborto mal hecho, realizado en las condiciones que impone la clandestinidad de la práctica. Así lo informó hoy el sitio de noticias locales Pilar a Diario, que añadió que esta mañana en el programa Materia Prima, el doctor Esteban Sieling, director ejecutivo del hospital, lo confirmó públicamente. «El hecho está confirmado, relacionado con un aborto provocado, no espontáneo», manifestó.
La localidad de Pilar, que gobierna el intendente macrista Nicolás Ducoté, pertenece a la misma región sanitaria en la que falleció hace escasos días, también producto de un aborto clandestino, la joven de 34 años a la que se conoció como «Liz».
La mujer, de unos 30 años y cuyo nombre no trascendió, había llegado a la guardia del Hospital Sanguinetti de Pilar el miércoles pasado acompañada de su hermana. Tenía dolor abdominal y mucha fiebre. El diagnóstico: aborto incompleto.
El equipo de Salud cumplió con el protocolo estipulado para estos casos y se le completó el tratamiento. Le dieron antibióticos y quedó internada. El fin de semana se descompuso y fue llevada a la terapia intensiva, donde murió.
Aún no se sabe cómo fue el aborto porque a la mujer, madre de varios hijos, no se le encontró perejil en el útero. Tampoco lo tenía perforado ni ulcerado, pero sí introdujo algo en su cuerpo que la infectó y le terminó provocando la muerte.