El gobernador Carlos Verna firmó este viernes un convenio con la Universidad Nacional de La Pampa (UNLPam) para realizar el estudio fluvioecológico sobre la cuenca Desagüadero – Salado – Chadileuvú – Curacó, cuantificar el daño causado en el oeste por la merma del río, y eventualmente avanzar con una denuncia judicial contra San Juan y Mendoza.
En el acto estuvieron presentes el rector de la UNLPam, Oscar Alpa, y el secretario de Recursos Hídricos de la provincia, Javier Schlegel.
En este estudio de impacto ambiental, que tendrá un costo de 17 millones de pesos, trabajarán más de 30 investigadores. El informe se realiza para -eventualmente- tenerlo como antecedente ante una posible demanda judicial a las provincias como San Juan y Mendoza que cortan en el norte el río Salado con represas como El Tambolar y Punta Negra.
El proceso que seguirá la UNLPam es similar al realizado con el río Atuel, a través de un método holístico para determinar el caudal que se debería tener en el Salado para el restablecimiento del ambiente.
La situación del Salado es similar a la del Atuel, a raíz de una serie de represas y otras obras ubicadas aguas arribas -en San Juan, Mendoza y San Luis-, que mermaron también el ingreso de agua al oeste. En ese marco, se hará este estudio para, eventualmente, avanzar en la Justicia.
Luego de la firma, el rector de la UNLPam, Oscar Alpa, explicó que las tareas estarán a cargo de la Consultora de la Universidad. «En el trabajo conjunto que se viene haciendo ya hace años con el Gobierno de la provincia, en este caso con estudios hidrológicos en el río Salado», dijo. «Estamos contentos de continuar con la idea de trabajo conjunto, es realmente el compromiso que siempre mantuvo el gobernador con la UNLPam que se ve reflejado en este nuevo convenio que permite seguir haciendo estudios socio-económicos e hidrológicos en la problemática de nuestra Provincia”.
El trabajo se desarrollará a lo largo de los próximos 18 a 19 meses, con fondos de la Provincia. “Es una importante inversión hacia nuestros técnicos al conferir el estudio a la Universidad. Se arma un equipo técnico dentro de la Consultora, con profesionales que vienen trabajando en las distintas temáticas, docentes e investigadores, y permitirá el estudio para que el Gobierno avance en ese sentido”, dijo.
Por su parte, Javier Schlegel sostuvo que el estudio es similar al realizado con el río Atuel. “Es la cuantificación del daño ambiental por la ausencia del río Salado y la determinación del caudal fluvioecológico que debiera haber en el Salado. En el Atuel nos llevó cerca de cinco años hacer los estudios, aquí se hace todo junto en 19 meses”.
“Se podrá determinar cómo debemos tener el río Salado y obviamente, una vez determinado, quedará todo dispuesto para, en el caso de que no lo reconozcan las provincias aguas arriba, comenzar con la demanda”, agregó.
Las provincias involucradas serían San Juan, Mendoza y San Luis. «Esta última no tiene aportante, pero integra la cuenca. El Salado fue un río caudaloso, hace 10 años tenía un orden de entre 20 y 30 m3/seg y hoy no llega a 1 m3/seg», dijo. «Es obvio que hay que ser rápido con estas gestiones, si bien ya la Provincia ha presentado un amparo para no continuar con la presa El Tambolar que se está haciendo en San Juan, ésta es una acción que se está haciendo, al igual que con el Atuel, para conseguir el caudal que nos merecemos en el río Salado”.