Una joven de 23 años de edad fue golpeada por su novio y abandonada, durante la noche y en medio del campo, a unos 15 kilómetros de la localidad de Macachín. El agresor, de 20 años de edad, fue detenido durante un día: la Justicia lo liberó y le impuso una restricción de acercamiento, mientras avanza la investigación y se desarrolla el juicio.
El caso ocurrió entre la noche del martes 29 y la madrugada del miércoles 30 de enero, y se viralizó por las redes sociales. La chica es de Macachín, en tanto que su novio está viviendo en Anchorena. “La llevó a Salinas Grandes, la ahorcó, le pegó, le rompió el celular y tras eso la dejó abandonada a las 2 de la madrugada”, contó por Facebook una amiga de la joven. “Ella tuvo que caminar kilómetros hasta poder llegar al pueblo, gracias a un camionero que se percató de la situación. De ahí llamó a la policía”, contó.
La Policía confirmó que un camionero halló a la joven en un camino cercano a Salinas Grandes. Los uniformados, al ser alertados, se trasladaron al lugar para regresarla a Macachín.
Un hermano de la víctima dio más detalles. “Maltrató a mi hermana y la dejó sola a 15 kilómetros de su hogar. La Justicia lamentablemente, como lo veo yo, le dio una pena muy patética, obvio dejándolo libre. Pero digo que mi Justicia es como lo hacían antes, con sus propias manos. Esto lo voy a publicar todo los días hasta que él tenga lo que en realidad merece”, sostuvo.
Una tía también se sumó al relato. “Cobarde, poco hombre, pegarle, dejarla tirada en la ruta a la madrugada, romperle el celular y tirárselo al campo. Quedáte tranquilo que esta vez no te salvás. ¡Evidencias todas! ¡De Arriba no te la vas a llevar!”, le dijo.
No era la primera vez que ocurría una situación similar. “La agarró por segunda vez, porque en Santa Rosa, le pegó”, dijo la amiga de la chica. “Y no solo eso, le destrozó la puerta de su departamento; además de sacarle el celular y eliminar sus contactos; fotos, todo”, dijo.
Por lo pronto, la Justicia dispuso la detención y, luego de un día, su liberación. Le impuso una restricción de acercamiento y de contacto -por teléfono o redes sociales- por 90 días y lo imputó por violencia de género y daños. Se espera que, antes de que se cumpla ese plazo, dicte la sentencia del caso.