El ex presidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva fue condenado este miércoles a 12 años y 11 meses de cárcel en otro caso por delitos de corrupción y lavado de dinero en el marco de la investigación del Lava Jato.
De acuerdo con el diario Folha de Sao Paulo, Lula fue condenado por en una segunda causa por corrupción mientras cumple con la sentencia impuesta por otro juicio de esas características.
Lula fue condenado por supuestamente recibir más de 1 millón de reales (unos 270.000 dólares) en propinas referentes a las reformas de un inmueble en Atibaia que está en nombre de Fernando Bittar, hijo del amigo de Lula y ex alcalde de Campinas, Jacó Bittar. Según la sentencia, las obras fueron financiadas por las contratistas OAS, Odebrecht y Schahin.
No obstante, según la Justicia, pese a no ser el propietario de la casa de campo, Lula se benefició ilegalmente de las reformas en la misma por parte de empresas que fueron favorecidas en su Gobierno con contratos amañados con la petrolera estatal Petrobras.
«El condenado recibió una ventaja por ocupar el cargo de Presidente de la República, de quien se exige un comportamiento ejemplar como el mayor mandatario», escribió la jueza Gabriela Hardt, reemplazante de Sergio Moro, al considerar que la culpabilidad de Lula era elevada.