La pareja que regenteaba los prostíbulos El Amanecer y El Delfín, clausurados en 2011, fueron finalmente detenidos este jueves en General Acha. Personal de la Policía Federal los apresó, al quedar firme la sentencia que había dictado en 2017 el Tribunal Oral Federal de Santa Rosa a 4 años de prisión por el delito de trata de personas con fines de explotación sexual.
Los condenados fueron Julia Gil Solano y Héctor Mario Molina, un matrimonio, que habían abierto los dos cabaret sobre la ruta 152. Ahora la Corte Suprema de Justicia de la Nación declaró «inadmisible» sus apelaciones y de esa manera confirmó las condenas en su contra.
En marzo de 2011 fue clausurado El Amanecer y en noviembre de ese mismo año El Delfín, luego de que se realizaran inspecciones. En el primero encontraron a una menor de 17 años, oriunda de San Juan, que ejercía la prostitución en el lugar. Después se determinó que había sido la adolescente la que había dicho que tenía 23 años cuando se sacó la libreta sanitaria.
En sus declaraciones en el juicio ante el TOF, los dos acusados dijeron que era «todo legal» ya que fueron a la municipalidad a pedir la habilitación y libretas sanitarias y a la Policía. Y dijeron que no sabían que estaba prohibido abrir un cabaret.
Después declararon como testigos dos víctimas, que también ejercían la prostitución en el local, y la joven que al momento de los hechos tenía 17 años lo hizo por videoconferencia desde San Juan. Todas indicaron que mantenían relaciones sexuales en una pieza ubicada al costado del local y que hacían «pases» con los clientes. Indicaron que fueron tratadas bien y que no estaban en contra de su voluntad. Pero sostuvieron que el matrimonio sacaba provecho económico de la explotación sexual.