Las movilizaciones en los pueblos ribereños de La Pampa y de Río Negro siguen dando resultados. Ahora el Gobierno de Río Negro se “plantó” y reclamó estudios complementarios de impacto ambiental y que se desarrolle una audiencia pública para analizar el proyecto de la represa hidroeléctrica Portezuelo del Viento.
El titular del Departamento Provincial del Agua de Río Negro, Fernando Curetti, detalló que la provincia solicitó un estudio complementario al informe de impacto ambiental que presentó Mendoza. También una audiencia pública.
La decisión viene precedida de varias movilizaciones en ciudades ribereñas en contra del proyecto. También de la creciente baja del caudal del Colorado para este año.
La represa se pretende construir sobre el río Grande, el principal tributario del Colorado. La obra tendrá un costo de mil millones de dólares.
De esta manera Río Negro se acerca a la posición de La Pampa, que desde hace cuatro años viene cuestionando la represa y que, con los antecedentes de los ríos Atuel y Salado, denuncia que el Colorado va camino a mermar fuertemente su caudal.
El Gobierno pampeano, en rigor, está pidiendo un nuevo estudio de impacto ambiental. Considera que el que hizo Mendoza tiene gruesos errores y no abarca a toda la cuenca.
Además ataca los principales argumentos mendocinos: un mayor control de crecidas, la generación de energía, el riego y el consumo. Para La Pampa, semejante inversión no se justifica y sostiene que la obra, en realidad, es una excusa para posteriormente encarar un proyecto más ambicioso: el trasvase de agua del Grande al Atuel. Incluso hace números y asegura que con un tercio de la inversión se podría financiar un parque eólico que generaría la misma energía que la presa.
Nación envió dinero para Portezuelo y Pérez Araujo salió al cruce: «Es inviable»