Evo Morales ya salió de Bolivia. El avión de la Fuerza Aérea de México llegó la noche del lunes a Bolivia para recoger al mandatario depuesto, luego de la violencia en el país andino desatada por el golpe de Estado.
«Hermanas y hermanos, parto rumbo a México, agradecido por el desprendimiento del gobierno de ese pueblo hermano que nos brindó asilo para cuidar nuestra vida», dijo el presidente depuesto de Bolivia en su cuenta de Twitter. «Pronto volveré con más fuerza y energía«, agregó.
Cerca de las 21:20 (hora local), la aeronave de la Fuerza Aérea Mexicana Gulfstream 550, matrícula 3916, arribó a la ciudad de Chimoré, en el departamento de Cochabamba, después de hacer una escala en Lima para abastecerse de combustible.
Por su parte, el canciller mexicano Marcelo Ebrard confirmó en su cuenta de Twitter que Morales se encontraba «en el avión del Gobierno de México enviado para asegurar su traslado seguro» a su país.
Para un presidente indígena que representa al pueblo humilde, la Policía se amotina y da golpe mientras las FFAA piden su renuncia. Para políticos neoliberales que ostentan poder económico, Policía y FFAA reprimen al pueblo que defiende la democracia con justicia, paz e igualdad.
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) November 12, 2019
Este lunes, el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador informó que había otorgado asilo político a Morales, ante el riesgo que corre su vida en Bolivia, después de varios hechos de violencia cometidos contra el mandatario depuesto y su familia por grupos opositores.
El presidente electo de Argentina, Alberto Fernández, agradeció a López Obrador la ayuda prestada para refugiar al mandatario depuesto boliviano.
Fernández también fue el primero en informar que Perú había abierto su espacio aéreo para trasladar a Evo. «Mi gratitud al presidente de Perú (…) porque él habilitó el espacio aéreo peruano para que pueda llegar un avión de México para buscarlo a Evo y se movió diplomáticamente para tratar de facilitar la llegada de ese avión», dijo el presidente electo, desde el Centro Cultural de la Cooperación en Buenos Aires.
Militantes sociales y gremiales se reunieron en Santa Rosa y repudiaron el golpe a Evo Morales