Aníbal Fernández, a 20 días de asumir al frente de la intervención de Yacimiento Carbonífero de Río Turbio (YCRT), firmó una resolución que deja cesantes a 417 trabajadores que habían sido nombrados por la intervención anterior.
La noticia impactó en el corazón de la cuenca carbonífera y los despedidos quemaron hoy cubiertas en señal de protesta frente a las sedes de la empresa, en Río Turbio y en Río Gallegos. Por el momento, su reclamo no cuenta con el apoyo de los gremios ni del sector político del Frente para la Victoria.
Los despedidos son hombres y mujeres de distintas áreas. La lista incluye a personal administrativo de las oficinas que la empresa estatal tiene en Buenos Aires, en la calle Cabildo; a empleados de la sede de Río Gallegos y a trabajadores del yacimiento. Anoche, un grupo de ellos le reclamaban al coordinador general de la empresa, José Lucas Gaincerain, por los despidos. Gaincerain les pidió que formaran una comisión para seguir discutiendo, informó el diario La Nación.
Fernández, a través de Radio Nacional Río Turbio, xplicó desde Buenos Aires el alcance de la resolución. Aseguró que no despedía gente, sino que estaba revocando designaciones mal hechas, y adelantó que iba a denunciar al ex interventor, Omar Zeidán.
Según el actual interventor, el 30 de noviembre pasado se firmó la resolución 127/19 por la cual pasaron a planta permanente 417 agentes que habían ingresado durante el macrismo. Esa resolución es la que quedó revocada. Fernández explicó que esa resolución era ad referendum de una decisión ministerial. «El ministro nunca firmó, la actividad está parada desde agosto de 2019, le deben $6000 millones a la AFIP», dijo el exjefe de gabinete Cristina Kirchner. Agregó que «el interventor no estaba habilitado para incorporar a la gente a planta permanente».
Aníbal Fernandez prepara una denuncia contra el ex interventor. «El interventor actuó en franca desviación del poder. No tiene facultades para hacer eso. Ninguna de esa gente se enteró de esta posibilidad de trabajo por el diario o la radio, fueron elegidos a dedo y por absoluta discreción del interventor … Todo el acto es nulo», sostuvo.