La concejala humanista Alba Fernández presentó un proyecto de ordenanza para que la capacitación contemplada en la Ley Micaela sea obligatoria para colectiveros, taxistas y remiseros. Dijo que la iniciativa apunta a «impedir situaciones de acoso y/o abuso en el sistema de transporte público de pasajeras y pasajeros».
Fernández sostuvo que se saben casos de usuarias que «han sido amenazadas arriba del transporte público, otras han sido perseguidas por hombres para ser atacadas sexualmente o violadas» y comúnmente «las mujeres no denuncian, desconfían de las autoridades, no se acercan para pedir auxilio o protección».
Además, la concejala reclamó que se fomente la posibilidad de que haya mujeres conductoras de colectivos, taxis y remises.
“Esto permitirá avanzar en una ciudad inclusiva con perspectiva de género, ya que hay una ordenanza de paridad de género para incorporación de conductores y conductoras de servicios de transporte público de pasajeros”, dijo.