“Yo quiero un plan de salvataje, y no me gusta el concepto de la expropiación arbitraria. Aquí no hay un tema ideológico, el único recurso jurídico que tengo es la expropiación. Y por eso lo voy a usar. A mi me interesa salvar a la empresa, es mi único objetivo. Quiero que lo entiendan”, argumentó Alberto Fernández frente al CEO de Vicentin, Sergio Nardelli, que llegó ayer a la quinta de Olivos para buscar un mecanismo de negociación que evite la irrupción del Estado Nacional en esa compleja compañía privada que está en concurso de acreedores.
Según fuentes al tanto de las negociaciones, se abrió la puerta a una «instancia superadora». La empresa aceptó la intervención y ahora se empezaron a discutir mecanismos para el rescate de la empresa.
Fue importante la participación del gobernador de Santa Fe, Omar Perotti. «El presidente está dispuesto a escuchar alternativas superadoras», dijo a la salida, según La Política Online. También estuvieron el ministro de Producción, Matías Kulfas; el ministro de Agricultura, Luis Basterra; y la secretaria Legal y Técnica, Vilma Ibarra.
Perotti dijo que en la reunión Alberto fue «muy claro» en su objetivo de «rescate de la empresa» y evitó hablar de expropiación.
El gobernador santafesino adelantó además que este viernes los integrantes de la empresa se reunirán con Gabriel Delgado, el interventor designado por el Poder Ejecutivo, y con directivos de YPF para «analizar algunas de estas alternativas», ya que el plan inicial oficial es sumar a esa compañía a YPF Agro.
«El presidente ha dado instrucción de que el interventor tenga la instancia de colaboración de todo el personal de gerentes actuales, para que no exista impedimento o burocracia que demore el normal funcionamiento de la empresa», subrayó.