“Por sus hijas, Marino”. Así se titula una dura carta de María Luisa Storani, histórica de la UCR nacional y parlamentaria del Mercosur, dirigida al senador nacional Juan Carlos Marino, quien anunció que votará en contra del proyecto de interrupción voluntaria del embarazo. Le dijo que deje de lado el oportunismo político y le pidió que rectifique su voto.
La siguiente es la carta:
Me dirijo a Ud. para repudiar categóricamente su declaración falaz y oportunista sobre el proyecto de interrupción voluntaria del embarazo y pedirle que rectifique su conducta política y revise su voto.
No es verdad que haya consultado a las distintas posiciones. No lo hizo con las y los radicales que luchamos por la libertad de decidir y los derechos de las mujeres y que somos consideradas por la sociedad y respetadas por las distintas fuerzas políticas.
Ud. dice falazmente que el de la interrupción voluntaria del embarazo “es un debate que no está saldado completamente en la sociedad”. Por su naturaleza no existirá jamás el consenso que insólitamente demanda desconociendo la naturaleza de lo que se trata. Este debate es universal e histórico y usted tiene la obligación de tener una opinión para abonar el mismo.
Lo más trascendente y subjetivo es que su declaración haya ocurrido en un momento crucial del tratamiento del proyecto. Por eso es oportunista y porque se refugia en su interpretación de la voluntad de las y los pampeanos.
Es falaz afirmar que “La legalización del aborto es una ley que divide las aguas y que no genera consenso unánime en ningún ámbito ni en la sociedad en su conjunto”. ¿Desde cuándo en el radicalismo los temas atinentes a la libertad dependen del consenso o de la opinión pública según interpretaciones? Desde su concepción, ninguna de las conquistas radicales por el género humano hubieran ocurrido.
Ud, sobre la cuestión o no tiene opinión o la oculta y entonces le pido que se abstenga. Eso, y para las y los radicales, es menos vergonzoso que sus fundamentos. Su voto puede ser decisivo para continuar o no menoscabando la libertad de las mujeres. Le recuerdo: “La libertad es una cosa tan importante que nadie lucha contra ella. Cuando ocurre, es contra la libertad de las/os demás”.
Para favorecer que se forme una opinión y participe en el debate sin la simplificación de una contradicción cualquiera entre celestes y verdes le voy a acercar la mía con un informe sobre la cuestión de los abortos y otros temas de salud sexual y reproductiva en tiempos de Covid. De lo que están padeciendo millones de mujeres en el mundo en cuarentena y la nueva brecha entre las que cuentan con legislaciones que respetan el derecho de las mujeres a decidir y las que, como en nuestro País, les ocurre lo contrario y por su culpa, entre otros y otras.
Para eso le pido una entrevista. Por sus hijas que menciona en su lamentable declaración le ruego que me considere y ambos podamos consensuar, al menos, que es necesario que el País sepa que para el radicalismo ni el oportunismo ni la hipocresía son una política.