Alejandro Sosa (59 años), quien desde hace tres años padece una insuficiencia renal crónica y un amigo le donará un riñón para que se trasplante, recibió en las últimas horas la noticia más esperada: “Me llamaron del Hospital Alemán y me dijeron que viaje el miércoles que viene para acordar todo para la intervención. No te das una idea la alegría que tengo”, contó emocionado a Diario Textual.
La historia de Alejandro -empleado del gremio UTA- se conoció en abril del año pasado cuando un amigo suyo, Sergio Alfaro (55 años), colectivero, se enteró que se dializaba por una insuficiencia renal y sin dudarlo le dijo: “Te lo voy a decir así nomás, loco. Sin vueltas. Amigo, yo te voy a donar un riñón”.
La Justicia, frente a un amparo que presentaron, les dio el OK y se sometieron a estudios para avanzar con las cirugías. Pero la pandemia frenó todo y Alejandro debió esperar el llamado de los médicos.
Pasaron 9 meses y finalmente el celular de Ale sonó: “El doctor Palti, que es el que me va a intervenir, me dijo que el miércoles que viene tengo que estar en el Hospital Alemán para definir la fecha para el tan esperado trasplante. Siento una mezcla de alegría y mucha emoción”, dijo.
“Ni bien le conté a Sergio me dijo sin dudarlo que me acompañaba a Buenos Aires y entonces vamos a ir juntos”, dijo.
“¿Si tengo miedo? Para nada. Confío que todo va a salir bien y a la vuelta nos vamos a comer un buen asado juntos”, cerró Alejandro la charla con Diario Textual.