El Gobierno habilitó a partir de este jueves, y con una prueba piloto, la actividad turística en San Carlos de Bariloche, que había sido interrumpida por la pandemia del coronavirus que obligó a decretar el Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio (APSO) en marzo.
Por medio de la decisión administrativa 1819/2020, publicada hoy en el Boletín Oficial, el turismo volverá a la ciudad perteneciente a la provincia de Río Negro, pero será con numerosos protocolos y con un límite de hasta 500 personas exclusivamente del Alto Valle rionegrino.
Este esquema se presenta como un «ensayo ideal» que ayudará a aceitar todos los mecanismos exigidos en el contexto de la pandemia de cara al reinicio de los vuelos de cabotaje y el próximo verano.
Según detalla el documento, «se deberá garantizar la organización de turnos, si correspondiere, y los modos de trabajo y de traslado que garanticen las medidas de distanciamiento e higiene necesarias para disminuir el riesgo de contagio de Covid-19».
Además, desde la provincia deberán dictar las reglamentaciones necesarias para el desarrollo de las actividades, «pudiendo el gobernador implementarlas gradualmente, suspenderlas o reanudarlas, en el marco de sus competencias territoriales, en virtud de las recomendaciones de la autoridad sanitaria local y conforme a la situación epidemiológica y sanitaria».