El gobernador Sergio Ziliotto dijo este sábado, en diálogo con Radio Textual (LU 33), que instruyó a la Fiscalía de Estado que eleve a la Corte Suprema de Justicia de la Nación “todos los procedimientos” y un estudio científico de la Consultora de la Universidad Nacional de La Pampa que indica que no sobreexplotarán el acuífero del Valle Argentino si le sacan agua para inyectar al Acueducto del Río Colorado.
Este viernes, la Corte Suprema requirió a La Pampa que, en un plazo de 30 días, presente el programa ejecutivo de la obra.
“Ayer tomé conocimiento (de la resolución de la Corte) e instruí a la Fiscalía de Estado que eleve todos nuestros argumentos a la Corte Suprema. Hemos hecho todo lo que corresponde, desde el punto de vista normativo. Además, hay un estudio de la UNLPam que indica que un eventual desarrollo de esa obra no va a afectar el rendimiento del acuífero del Valle Argentino”, dijo.
Aguas del Colorado pretende hacer 40 pozos en el acuífero, distantes a 850 metros, que abarca un área de explotación de 700 hectáreas.
Se utilizarán en casos de emergencia cuando el Acueducto del Colorado salga de producción, o en casos de mantenimiento.
Según ha dicho el Gobierno, solo sacarían agua de allí unos 15 días al año.
La Consultora de la UNLPam ya hizo en 2017 un estudio sobre el tema. Se denomina “Estudio de caracterización hidrogeológica general de la zona central de los departamentos de Utracán y Atreucó”.
El Acuífero del Valle Argentino es una zona ubicada entre Chacharramendi, El Carancho, General Acha, Padre Buodo, Doblas y Macachín, entre otras localidades o parajes del centro de la provincia. Ingresa, incluso, al oeste de la provincia de Buenos Aires.
La consultora encabezó un estudio para determinar, entre otros puntos, qué cantidad de agua podría sacarse sin caer en una sobreexplotación del acuífero. Esos usos no solo podrían ser para el Acueducto del Colorado: también, por supuesto, para el uso doméstico en las localidades de la zona; para riego; y para la ganadería.
Se plantearon cuatro escenarios simulados de extracción y de recarga. Así, se evaluó cómo respondería el acuífero si, además de los usos en la zona, le extraen -desde 38 pozos- para el acueducto 600 m3/h durante un mes, dos meses, cuatro meses y seis meses. Incluso ni ante este último escenario habría inconvenientes.
El objetivo general del trabajo consistió en la formulación y análisis de distintas alternativas de gestión de los recursos hídricos subterráneos para distintos usos, enmarcado siempre dentro del contexto de los objetivos de desarrollo de la región.
En el acuífero del Valle Argentino es donde el Gobierno pretende realizar perforaciones para asistir al Acueducto del Río Colorado, cuando éste se rompa. Por esto, hubo manifestaciones en General Acha. Incluso presentaciones judiciales, que terminaron en la Corte.
El Gobierno ha sostenido que solo quiere usar esa agua cuando se rompa el Acueducto del Colorado (generalmente las roturas se producen al sur de esta ciudad, cerca de Pichi Mahuida). Es decir, unos 15 días al mes.
¿Puede resistir el acuífero a la extracción para esos 15 días? Ampliamente, dijeron los consultores. Es que, incluso, si se extrajeran 600 m3/h en forma continua durante seis meses la napa bajaría solo 10 metros en un lapso de 42 años.
Entre los objetivos particulares de este estudio, se destacaron el estudio de la hidrodinámica del sistema; análisis hidroquímico del sistema; elaboración de un modelo conceptual del sistema; prospección geoeléctrica en Corriente Continua; modelación numérica del flujo subterráneo en la zona saturada. Asimismo, el establecimiento de unidades de gestión basada en los usos actuales y futuros del área de estudio y simulación de la gestión mediante escenarios para explotación del agua subterránea.
El equipo de trabajo contó con la coordinación general de Carlos Schulz; los profesionales especializados Eduardo Mariño y Eduardo Castro; el profesional asistente Germán Morazzo y los estudiantes en calidad de asistentes de investigación Pedro Di Liscia, Mauro Braun y Natalia Loyola, luego reemplazada por Luis Morales.
El equipo externo se conformó con Daniel Cardín, asistente en Geomática; y Hugo García, asistente en Modelación. También para Geofísica y Perforaciones, participó la empresa Andina Perforaciones SRL.