El fiscal general de Santa Rosa, Guillermo Sancho, encabezó el fin de semana un allanamiento en la Sección Canes, dentro del predio de la Escuela de Policía: investiga a un grupo de policías por robos mientras realizaban tareas adicionales.
Los investigadores secuestraron cerámicos, reflectores y maderas. Habrían sido robados en una de las obras del Hospital Molas.
La olla comenzó a destaparse por el caso de un cabo, José Carlos Reinhard, quien fue acusado de robo. Poco después firmó un acuerdo de juicio abreviado tras haber admitido el delito de “peculado” y habría prendido el ventilador: habría dicho que estaban más policías involucrados.
Incluso entregó un teléfono con conversaciones en Whatsapp, donde habría pruebas de lo que dice. Ese celular sería peritado en las próximas horas.
Por lo pronto, por el caso hay abierta una investigación penal y paralelamente un sumario en la Fiscalía de Investigaciones Administrativas.