Una pareja de Anguil, con dos niños, ocupó una casa social que, dijeron, se encuentra abandonada.
“Estamos en la calle y la casa está abandonada”, se justificó Juliana Rojas en diálogo con Diario Textual.
La casa -cuyos adjudicatarios, contó, serían menores de edad judicializados- no tiene servicios de electricidad ni de gas.
Juliana -acompañada por su pareja Brian Herpstsommer- contó que se acercó al Instituto Provincial Autárquico de Viviendas (Ipav). “Queremos pagar la deuda que tiene la casa, pero no encontramos respuesta”, dijo.
A su vez, también dijo que no han tenido ayuda por parte de la intendencia de Anguil.
“Estamos sin luz. La cooperativa nos dice que no pueden ponernos un medidor porque ya hay uno, aunque la luz está cortada”, dijo Brian.
