Nunca cerrará la herida por Lucio Dupuy, el nene de 5 años asesinado a golpes en La Pampa. Maximiliano, su tío, dijo en TN que Magdalena Espósito Valenti, detenida por el hecho junto a su pareja Abigail Páez, le sacó la tenencia del nene para pedir las asignaciones familiares. «Nos lo sacó para reclamar dinero, las asignaciones y el IFE», dijo.
“Me invaden muchos sentimientos, pero trato de que no crezcan porque, si no, creo que actuaría de otra manera. Trato de poner mis pensamientos en el bien que le hicimos a Lucio con mi esposa y mi familia cuando él estuvo en casa”, dijo el hombre.
“Lucio compartió casi dos años con nosotros, era uno más de la familia“, dijo en el programa Cámara del Crimen, y narró las circunstancias que hicieron que el nene volviera con su mamá luego de que ellos tuvieran la tutela durante ese tiempo.
“Cuando Magdalena y mi hermano (Cristian, padre de Lucio) deciden separarse, él estaba en Luján y ella decidió irse a Santa Rosa. Entonces Magdalena empieza a ir y venir desde Santa Rosa a General Pico, dejaba al nene tres o cuatro días, y ahí él se quedaba con nosotros o con los abuelos”, recordó. “Lucio no tenía un hogar fijo”, subrayó.
“En enero del año pasado, ella decide llevarse a Lucio, pero a los dos días el nene se brotó todo, le agarró una reacción alérgica y el médico le dijo a Magdalena que era estrés emocional”, contó.
«Volvió, lo dejó otra vez y cuando Lucio empezó a ir a la guardería acá en Pico, ella ya no apareció más», dijo. «Nos cedió la tutela. Solo venía a firmar papeles y nada más. Nosotros lo tuvimos desde noviembre de 2018 hasta julio de 2020″.
Sin embargo, según Maximiliano, todo cambió con la llegada de la pandemia y la imposición de la cuarentena estricta. “Desde marzo de a julio de 2020, para nosotros fue un calvario. Ella nos mandaba a la Policía, y yo tenía que ir a la Comisaría 4° de la Niñez (en General Pico) una y otra vez”, dijo.
Lucio, de 5 años de edad, murió el viernes 26 de noviembre por la noche, luego de ser brutalmente golpeado. La sospecha es que era maltratado en forma reiterada: entre diciembre de 2020 y marzo de 2021 fue hospitalizado en cinco oportunidades por diversas fracturas -por ejemplo, de un brazo y de un dedo-. Sin embargo, pese a esas alertas, nadie del sistema sanitario hizo una denuncia.
Vivía en una casa de la calle Allan Kardec al 2300, de Santa Rosa, junto a su madre y a la novia de su mamá.
Lucio fue llevado cerca de las 21 horas del viernes 26 de noviembre por Abigail, en brazos, a la posta sanitaria del barrio Río Atuel. El nene estaba desvanecido. Su madre, en ese momento, estaba trabajando de moza en el Hotel Mercure.
La posta estaba cerrada. Por eso un vecino comenzó a hacerle respiración boca a boca. Luego se sumó una enfermera para hacerle RCP. Otra vecina, al ver que no llegaba la ambulancia, cargó al nene en su auto y lo llevó, en contramano, al Hospital Evita. Allí se confirmó su muerte, cerca de las 21.30 horas.
Pasadas las 22 horas, Abigail y Magdalena fueron detenidas por orden de la Justicia.