Las uvas de Casa de Piedra están asombrando a empresas de Mendoza: hay alta calidad y mucha producción.
¿Las razones? Las autoridades del Ente Provincial del Río Colorado creen que hay diferentes factores, que van desde el suelo al ambiente. Incluso investigadores del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) están realizando un trabajo de campo que tiene una interesante hipótesis: el viento de moderado a intenso podría ser clave en el proceso de mejorar las uvas.
El trabajo, a través de una beca posdoctoral, está encabezado por Rodrigo Alonso y Federico Berli, con la asesoría de Patricia Piccoli, de la Universidad Nacional de Cuyo.
Alonso -ingeniero agrónomo y doctor en Ciencias Biológicas- dijo a Diario Textual que el viento “es una característica distintiva” en Casa de Piedra.
Casi todos los días hay vientos de moderados a intensos. “En Mendoza no hay estos vientos…”, advirtió.
“Hemos advertido que los vinos que salen de Casa de Piedra son de buena calidad. No solo de buena calidad, sino también con alta producción. ¿Cuál es la razón de la calidad? Creemos que el viento es una característica positiva. Por eso estamos estudiando cómo el viento aporta cualidades positivas a la uva”, dijo.
Una de las hipótesis es que, con el viento, la planta se estresa y produce compuestos que aportan calidad a la uva. “Estamos en pleno estudio”, agregó.