La Sala B del Superior Tribunal de Justicia de La Pampa confirmó la condena a 3 años de prisión a Eduardo Ibarra, el hombre que, alcoholizado, provocó un choque que terminó con la vida de su ahijada Olivia Ibarra, de 1 año y 10 meses, en la ruta 5, entre Santa Rosa y Anguil. El conductor tenía 1,68 gramos de alcohol en sangre (el máximo permitido es 0,50).
La Sala B -en un fallo al que accedió Diario Textual– rechazó dos recursos de apelación: de los abogados familia de la nena y del acusado.
Es que, en primera instancia, el juez Andrés Olié lo había condenado a 4 años de prisión. Posteriormente, los jueces Pablo Balaguer y Mauricio Piombi, del Tribunal de Impugnación Penal (TIP), le redujeron a tres años de prisión la pena a Ibarra por ese delito: argumentaron que la pequeña Olivia iba con su madre, en la falda del lado del acompañante y sin cinturón de seguridad.
Ahora el STJ analizó el fallo del TIP y, al rechazar ambas apelaciones de las partes, confirmó la condena a Ibarra. Ahora es posible que el condenado acuda a la Corte Suprema de Justicia de la Nación.
El 25 de febrero de 2020, Ibarra, que conducía un Volkswagen, atropelló desde atrás el Renault 9 que manejaba su primo Rubén Fabio Ibarra, quien a su vez iba con su familia, la esposa María José Arroyo y sus hijas Daiana Marilina (8), Maiten (11) y Olivia Nataly Ibarra Arroyo (22 meses).
Olivia, la niña menor del matrimonio, murió al ser despedida del habitáculo. El resto de la familia sufrió lesiones graves.
Las dos familias volvían pasada la medianoche de una fiesta familiar que se hizo en Santa Rosa.
Eduardo Ibarra estaba alcoholizado porque las pericias arrojaron que tenía 1.68 g/l de alcohol en sangre.
Los peritos determinaron además que al momento del choque iba manipulando su teléfono celular, haciendo llamadas, recibiendo mensajes y a una velocidad superior a los 100 km/h.