“A tres meses de haber presentado desde nuestro bloque el pedido para que el intendente convoque al Consejo Municipal de Género seguimos sin avance alguno. Y las cosas siguen mal”, resumieron en el encabezado de la nota, dirigida a Luciano Di Nápoli, los concejales del FrePam, ante el conflicto entre trabajadoras de la Dirección de Género de Santa Rosa y su directora, Gabriela Bonavitta.
Y agregaron: “En ese momento estábamos frente a un extenso conflicto en la Dirección de Género del Municipio donde las propias profesionales trabajadoras del sector llevaron adelante sus reclamos, sus medidas de fuerza y llegaron a una conciliación obligatoria logrando finalmente un acuerdo de partes”.
“Pero lamentablemente ese compromiso tampoco se ha cumplido de parte del Ejecutivo Municipal y estamos en las puertas de la continuidad de ese conflicto”, dijeron en la nota.
Las trabajadoras municipales del área de Género y Diversidad decidieron declararse en estado de asamblea, alerta y movilización luego de que la directora del área incumpliera lo acordado en la conciliación obligatoria dictada por la Secretaria de Trabajo.
Ahora, los concejales frepamistas reclamaron que se reúna el Consejo municipal: “Con el agravante que el paso del tiempo sin que se cumpla con la palabra y las medidas que se comprometen desgastan y resquebrajan las relaciones laborales. Más aún en un ámbito que debería tener una mirada que contenga las necesidades de quienes deben llevar adelante la tarea de atención y contención de las víctimas de violencia de género que como todos sabemos su número de denuncias continúa en aumento”.
“Ante nuestra insistencia desde el oficialismo en el concejo deliberante se manifestó que el intendente estaría pronto a convocarlo. Cabe recordar, que independientemente del conflicto actual este Consejo debió ser convocado mensualmente para tratar políticas públicas preventivas en relación a géneros y no lo ha hecho en tres años de gestión”, concluyeron en la nota.
En este conflicto, la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) manifestó la “falta de diálogo” por parte de las autoridades municipales, el “destrato” al personal sindicalizado, el trabajo sin directivas y sin respaldo al equipo del área.