Alfredo Carrascal, presidente de la cooperativa CPE, dijo que con la segmentación de tarifas eléctricas “las injusticias van a estar a la orden del día” ya que habrá asociados, por ejemplo, que por diversas razones no se inscribieron y sufrirán fuertes incrementos en los pagos. Además, cuestionó la “falta de claridad en la difusión” y el “limitado acompañamiento” de organismos del Estado.
Carrascal dialogó con Radio Textual (LU 33), en el marco de las elecciones donde se renovó el Cuerpo de Delegados. “La cooperativa está muy bien. El asociado ve a la CPE como una institución que presta servicio de primera línea y siempre con un costo de lo más accesible, como telecomunicaciones y artículos del hogar”, dijo. “Puertas para adentro hay una preocupación por estar atravesando un escenario muy complejo, con servicios que tienen tarifas regulados por el Estado. Hasta hace dos años, solo era regulado era el servicio eléctrico y ahora también telecomunicaciones”, sostuvo. “Estamos viviendo una situación muy compleja por la pérdida del poder adquisitivo y eso también, en algún punto, se refleja en la cooperativa: retraso en el pago de la factura e incluso también en el estado de ánimo del asociado”, agregó.
En el caso de la energía, resaltó, la CPE colaboró en la inscripción para la implementación de la segmentación de las tarifas. “La CPE tuvo una actitud muy responsable, poniendo personal fuera del horario de trabajo para asesorar en los trámites”, dijo el dirigente cooperativista.
En la provincia la energía eléctrica tiene como fuente mayoritaria el Mercado Eléctrico Mayorista (MEM) al que se vincula la Administración Provincial de Energía (APE) de La Pampa. El “valor final” del servicio eléctrico se compone de tres rubros: costo de la energía eléctrica; costos operativos propios del distribuidor; y cargos nacionales, tasas municipales e impuestos provinciales y nacionales. El “costo de la energía” se compone de los rubros que se pagan al MEM -administrado por la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (CAMMESA)-, más el costo propio de la APE pampeana.
“La CPE ayudó con los trámites, pero uno tiene, aún, la duda de si hizo lo suficiente…”, expresó Carrascal. “Va a haber muchas injusticias que generarán malestar, pero además en los bolsillos se va a notar y mucho”, dijo.
– ¿Injusticia porque habrá gente que pagará una tarifa que no le corresponde?
– Exactamente. Tal vez gente que merece o que está en el universo que reúne los requisitos, no va a acceder porque no hizo el trámite o porque no interpretó bien las consignas y respondió mal. O, a lo mejor, algún “vivo”, que siempre hay, tendrá el beneficio y no lo merece. Habrá un entrecruzamiento de datos y se verá la eficiencia que tiene… Pero eso llevará un tiempo, donde las injusticias van a estar a la orden del día...
– Siempre se plantea la discusión del costo de la generación de la energía. ¿Sigue la incertidumbre sobre el costo y de lo que pagamos de tarifa?
– Nosotros, desde hace cinco o seis años, cuando en los inicios del Gobierno de (Mauricio) Macri se planteó la dolarización de la generación y transporte, nosotros dijimos que era una barbaridad. Entonces, se puso en el tapete esa discusión, pero incluso con el cambio de Gobierno hasta ahora no ha habido avances. Se está analizando cuánto se va a subsidiar al consumidor, que en definitiva es el más perjudicado, pero a ninguno se le ocurre poner el dedo en cuál es la rentabilidad justa de empresas generadoras que se hicieron de esas empresas con licitaciones donde no pusieron capitales en riesgo. Con eso nadie se mete. La están juntando con la pala, mientras que el pobrerío lo sufre. Las empresas de generación y transporte siguen ganando fortunas y en dólares. Mientras tanto, las distribuidoras, como las cooperativas como la CPE, debemos bancar las diferencias de los costos, sostener al personal, bancar la falta de pago de los contribuyentes que no pueden llegar a pagar las facturas. Es una situación muy complicada, pero como organización importante de la ciudad y la región, tenemos el deber ético de propiciar la esperanza y sostener los servicios y la dignidad del trabajo.
El Gobierno Nacional creó el Registro de Acceso a los Servicios de Energía (RASE) al que deben acceder vía internet todos quienes aspiran a conservar el subsidio. Con la información que aporta cada persona, se la califica provisoriamente en uno de los tres niveles y después se verifica la información con diferentes bases de datos, para asignar el nivel definitivo.
El programa de segmentación contempla los siguientes cambios en la asignación del subsidio:
Nivel 1: ingresos altos, quita escalonada y progresiva hasta el 100%.
Nivel 2: ingresos bajos, acceden a un subsidio que incremente el valor del servicio anual hasta el 40% del Coeficiente de Variación Salarial del año anterior.
Nivel 3: ingresos medios, acceden a un subsidio que incremente el valor del servicio anual hasta el 80% del Coeficiente de Variación Salarial del año anterior.
Para su aplicación desde el período “septiembre 2022”, se han anunciado los precios en el MEM y consecuentemente los subsidios para cada nivel:
Nivel 1: ingresos altos, quita del 21% del subsidio, que provocará un aumento entre el 20% y el 22% en el valor final del servicio.
Nivel 2 y 3: ingresos bajos y medios, conservan el mismo valor de subsidio.
El pasado 12 de septiembre se recibió el listado con los usuarios residenciales con la asignación del nivel realizada por Nación y para su aplicación en la liquidación del servicio eléctrico en el período “septiembre”.
Una resolución reciente de la Secretaría de Energía de Nación, dispone que, para el caso del Nivel 3 (ingresos medios), a la energía consumida por encima de 400 kWh en el mes, se le aplicará el subsidio establecido para el Nivel 1 (ingresos altos). El 97% de los usuarios residenciales consumen hasta 500 kWh/mes, estiman en la CPE.