El conflicto entre el Sindicato de Choferes de Camiones de La Pampa y la intendencia de Santa Rosa por los recolectores del Ente Municipal de Higiene y Saneamiento Urbano (Emhsu) volvió a tomar temperatura. La secretaria de Gobierno de Santa Rosa, Carmina Besga, realizó una denuncia contra el delegado del gremio, Jorge Velazques: dijo que ayer, en la segunda reunión de conciliación, la amenazó con prenderla fuego.
“La amenaza es inaceptable y rompe el clima de buena fe en que se debe realizarse una negociación”, dijo Besga y resaltó que este gravísimo hecho se produjo delante de al menos una docena de personas.
La funcionaria, que integra parte el Directorio de la gerencia del Emhsu, recordó que hace pocos días había expresado en conferencia de prensa que no estaban dispuestos a negociar bajo amenazas y extorsiones. “Es inconcebible en democracia, un día amenazan con hacer explotar todo, y todos lo vieron, fue en vivo”, dijo. “Ahora, delante de todos los que estábamos ahí, dijo que me iba a prender fuego y que además quemarían todos los bienes de la empresa (camiones). ¿Me pregunto cómo sigue la secuencia? ¿Cuál es el próximo paso?”, sostuvo.
Producto de la denuncia penal, la Fiscalía dictó una restricción de prohibición de acercamiento del denunciado Velasquez de acercarse a la funcionaria, a la municipalidad y a la empresa estatal Emhsu.
“El ente se encuentra abocado a garantizar una ciudad limpia y esperamos que prime la razón, la buena fe y un dialogo maduro por parte del Sindicato, para encontrar una solución que no ponga a los ciudadanos de rehenes”, dijo Besga. “No está de más remarcar que está administración nunca interrumpió el diálogo, que siempre se ha cumplido con todas las obligaciones laborales, pagando en tiempo y forma salarios, horas extras, aportes laborales, sindicales y a la obra social; todo ello en el marco del derecho privado que regula la relación de la empresa pública con los trabajadores”.
“La decisión de declarar un paro por tiempo indeterminado no tiene justificación y es injusta para con los vecinos que en las circunstancias del país hacen un esfuerzo para mantener al día el pago de las tasas”, finalizó.
El conflicto estalló cuando el municipio despidió recortó horas extras y echó a tres empleados. En respuesta a esas decisiones, el Sindicato de Camioneros lanzó un paro por tiempo indeterminado que dejó a Santa Rosa sin recolección de residuos por un par de días.
El secretario de Trabajo, Marcelo Pedehontaá, intervino y en la madrugada del 13 de junio dictó la conciliación obligatoria por 15 días para tratar de que haya acuerdo, algo que por ahora parece lejos.
La traba está en que Camioneros exige la inmediata reincorporación de los despedidos y garantías de que no habrá más despidos. En tanto, el municipio no quiere dar marcha atrás con las cesantías porque considera que fueron con justa causa.