El personal docente y no docente del Colegio de la Universidad Nacional de La Pampa (UNLPam) fijó su posición respecto del paro convocado por CONADU Histórica y demandó una recomposición que revierta la pérdida salarial real superior al 54 por ciento, además de otras problemáticas que afectan a la institución.
“Es necesario pensar colectivamente si optamos por seguir renunciando a una educación de calidad y cargar con el pesar que significa negar lo que creemos justo y pedagógicamente potente o, hacer visible nuestro proyecto de colegio y luchar por su realización”, aseguró.
Las autoridades difundieron una carta abierta a la comunidad, donde renovaron su reclamo salarial, las “cada vez más preocupantes” condiciones edilicias y el “presupuesto insuficiente” para el desarrollo de actividades escolares.
Este lunes comenzó un nuevo paro docente en las universidades del país, en reclamo de aumentos salariales. Hoy no hay actividades y este martes 13 y miércoles 14 de agosto hay jornadas de visibilización, en disconformidad con la crisis salarial que atraviesan los trabajadores y las trabajadoras de las universidades públicas. La situación se repetirá durante el 20 y 21 de agosto de la próxima semana.
Carta abierta a la comunidad
Santa Rosa, La Pampa, 12 de agosto de 2024.-
Compartimos este documento para dar a conocer nuestro posicionamiento ante el paro convocado por CONADU Histórica (Federación nacional a la que está afiliada nuestra organización de base ADU) y renovar nuestros reclamos específicos como docentes y no docentes preuniversitarias/os del Colegio de la UNLPam.
Queremos destacar las siguientes problemáticas que nos afectan:
– Falta de recomposición salarial acordada por paritarias
– Condiciones edilicias cada vez más preocupantes
– Presupuesto insuficiente para el desarrollo de las actividades escolares
La Educación Secundaria es obligatoria en la República Argentina desde el año 2006, por ello el Estado es responsable de garantizar su funcionamiento. El colegio es una institución de formación media, con 41 años de existencia, que ha funcionado desde 1991 en el actual edificio y depende de la Facultad de Ciencias Humanas (UNLPam).
El proyecto institucional del Colegio de la UNLPam implica un proceso complejo con discusiones genuinas, en donde los diferentes actores asumen con responsabilidad y compromiso su trabajo.
Defendemos un proyecto educativo que:
– Estimula la participación organizada y permanente en diferentes ámbitos.
– Promueve el trabajo en equipos docentes para la formación, el intercambio y la planificación de la enseñanza.
– Impulsa permanentemente el diálogo entre docentes, familias y comunidad en general.
Para garantizar tal propuesta se requiere:
– Material didáctico y recursos económicos. Es imprescindible el compromiso de quienes gestionan, asegurar la disponibilidad de insumos básicos como hojas, fotocopias, pizarrones, entre otros recursos.
Una de las tantas acciones que caracterizan la labor del colectivo del colegio son los proyectos interdisciplinarios, estos incluyen salidas pedagógicas, viajes de estudio, producciones, proyectos y otras actividades suspendidas por falta de presupuesto.
– Instalaciones adecuadas. El edificio se encuentra en un estado “crítico” desde hace décadas. Los espacios para el desarrollo de las clases son insuficientes, inseguros e inadecuados. Por ejemplo: se da clase en aulas en las que se filtra la lluvia y en espacios reducidos.
– Actualización salarial. Estamos sufriendo las precarias condiciones resultantes de la combinación de la alta inflación, el ajuste fiscal y el congelamiento de nuestro salario. Demandamos una recomposición que revierta la pérdida salarial real superior al 54%.
El conjunto de la situación descrita sobre presupuesto, salario y condiciones laborales no es nuevo. En las distintas gestiones hemos reclamado por el sostenimiento de la educación pública y nuestros salarios. Actualmente tenemos un edificio que no recibe ningún reacondicionamiento, una pérdida salarial inédita y un presupuesto inexistente para nuestro colegio.
En este contexto es necesario pensar colectivamente si optamos por seguir renunciando a una educación de calidad y cargar con el pesar que significa negar lo que creemos justo y pedagógicamente potente o, hacer visible nuestro proyecto de colegio y luchar por su realización.
