Técnicos, policías y fiscales realizaron este viernes por la tarde tareas con reactivos para medir el grado de toxicidad de la boca de tormenta de la esquina de Jujuy y Río de la Plata, donde esta semana fallecieron dos trabajadores. En las mediciones dio positivo la muestra para ácido sulfúrico. En tanto, no encontraron rastros ni de cianuro ni de amoníaco. El trabajo fue coordinado por el fiscal Andrés Torino, a cargo de la investigación.
El hecho ocurrió cerca de las 13 horas del martes 22, cuando empleados de la empresa Vial A realizaban una obra cloacal en la esquina de Jujuy y Río de la Plata, en el norte de Santa Rosa. Según se ha determinado, bajaron sin máscaras de protección y los afectó un gas tóxico conocido como sulfuro de hidrógeno.
Los investigadores, hasta el momento, han determinado que Claudio Olgado, de 24 años de edad, bajó al sistema cloacal y se mareó por los gases tóxicos. Su compañero Ezequiel Uriarte, de 27 años, intentó rescatarlo, pero también fue afectado por esos gases.
Para el rescate de ambos fueron convocados los bomberos. Ambos trabajadores fueron internados en el Hospital Favaloro. Esa misma tarde se confirmó la muerte del joven de 24 y un día después la de su compañero de 27.
Uno de los bomberos, de 36 años, fue hospitalizado: al bajar a la boca de tormenta, accidentalmente, se le desplazó la mascarilla y aspiró gases tóxicos. Había sido dado de alta, pero se descompensó y volvió a ser internado.
La autopsia a la primera víctima fatal arrojó que murió por “anoxia cerebral, insuficiencia respiratoria y asfixia por inhalación de sulfuro de hidrógeno”. Lo mismo para la segunda víctima fatal.