El Sindicato de Trabajadores Judiciales de la provincia de La Pampa (SiTraJ) anunció que en la próxima semana se “intensificarán” las medidas de fuerza, en reclamo de un mayor aumento del 3,2 % que dio el Gobierno provincial -más la inflación que se registre de aquí a fin de año- y el mínimo garantizado de 800 mil pesos.
El jueves, las y los trabajadores del Poder Judicial pampeano realizaron una medida de fuerza con retiro a las 10 y a las 17 horas. En la misma, por decisión mayoritaria, se votó que se “intensifiquen las asambleas” a lo largo de la semana próxima.
El reclamo principal de la jornada se centró en el salario, con el pedido de una mejora en el básico que logre materializar una carrera judicial acorde y equitativa.
Susana Funes, secretaria general de SiTraj, explicó en qué se centra el reclamo. “Pedimos especialmente al gobierno que reabra las paritarias. Esta cláusula de ‘a cuenta de futuros aumentos’, sabemos que congela el salario de todos los trabajadores y produce un achatamiento en las otras categorías, que cobran sólo un 3,2% de aumento. Estamos en alerta porque no podemos aceptar la pauta salarial”, dijo.
Recientemente, el Gobierno dio un incremento del 3,2 por ciento ahora (es decir, una cláusula gatillo de acuerdo a la inflación en la región pampeana) y comunicó que en noviembre aplicará la inflación de octubre y ya en enero de 2025 dará el aumento de noviembre y diciembre. Uno de los datos salientes es que llevó el mínimo garantizado a 800 mil pesos, es decir, dio un incremento del 35% a los que menos perciben. En el caso de una familia de tres integrantes, el mínimo se elevará a 900 mil y con cuatro a 1.046.000 pesos.
Esa oferta fue aceptada por los docentes, en tanto que los dirigentes de la Mesa Intersindical -integrada por una decena de gremios, entre ellos los judiciales- si bien no la rechazaron, decidieron no firmarla.