El ministro de Economía de la Nación, Luis Caputo, dijo que por el momento no pueden bajar las retenciones a las exportaciones agropecuarias. Ensayó una contraofensiva en la que acusó a las provincias de no reducir Ingresos Brutos y volvió a supeditar la reducción de ese tributo a “la estabilidad macroeconómica” del país.
A tono con la creciente presión del campo, que vaticina una ola de quebrantos en los próximos meses, los gobernadores Martín Llaryora (Córdoba), Maximiliano Pullaro (Santa Fe) y Rogelio Frigerio (Entre Ríos) se reunieron en las últimas horas y le exigieron a Javier Milei bajar ya las retenciones. Un pedido similar, aunque supeditado principalmente a los pequeños productores rurales, hizo días atrás el Gobierno pampeano.
En las entidades del campo ya admiten a viva voz que la situación que atraviesa el sector empeoró notablemente con Milei y que, sin una reducción en los derechos de exportación, se producirán numerosas quiebras en el corto plazo en un contexto de precios bajos, falta de lluvias y disparada de los costos en dólares.
La bronca de las entidades del campo con el Gobierno creció cuando la Mesa de Enlace fue con ese reclamo al Gobierno pero se tuvieron que conformar con ser recibidos por el secretario de Prensa Eduardo Serenelli, sin poder de decisión en el tema. Esa actitud cayó muy mal en productores de base y fue botón de muestra para que dirigentes opositores en distintas entidades (sobre todo a Nicolás Pino en la Sociedad Rural) ratifiquen las críticas por la moderación de la Mesa de Enlace a la hora de presentar ese reclamo al Gobierno.
Con la presión de las bases, la Mesa de Enlace endureció el reclamo y Caputo se vio obligado a adelantar un encuentro con los ruralistas para cuando volviese de Estados Unidos donde viajó para la asunción de Trump.
Por lo pronto, luego de la reunión de los tres gobernadores, Caputo rechazó el pedido. “Solo podemos reducir impuestos si alcanzamos un superávit fiscal”, dijo.
“La ortodoxia fiscal y monetaria no es negociable”, dijo en X. Incluso agregó que esta política representa la mayor garantía para los sectores productivos, asegurando que Argentina no volverá a enfrentar las crisis que ha sufrido durante décadas.
En tanto, Caputo apuntó contra los municipios y las provincias por los impuestos. “Ojalá seamos cada vez más los que entendamos que la forma más saludable para bajar impuestos es bajando el exorbitante nivel de gastos que aún hoy algunas provincias y municipios tienen”, dijo. “No hemos visto a ninguna provincia reducir Ingresos Brutos, el peor impuesto”.
