Las fuertes lluvias que comenzaron esta madrugada en la ciudad bonaerense de Bahía Blanca, con registros que superaron los 250 mm, provocaron una catástrofe natural casi sin precedentes. Gran parte de la ciudad se encuentra bajo agua, hay 10 muertos, mil familias evacuadas y decenas que esperan la ayuda del personal de emergencia.
El Gobierno bonaerense calificó el fenómeno como una tragedia. Todas las actividades fueron canceladas. El aeropuerto está cerrado y algunas rutas de acceso a la ciudad sufren severos destrozos.
Las autoridades no descartan la posibilidad de que el número de víctimas fatales aumente, dada la magnitud del desastre climático que ha dejado zonas de la región gravemente afectadas.
La Municipalidad de Bahía Blanca confirmó que el número de fallecidos por el temporal aumentó a 10, en medio del operativo de emergencia que se desarrolla en la ciudad.
Las autoridades locales trabajan en conjunto con el Gobierno nacional y la provincia de Buenos Aires para asistir a los damnificados, mientras siguen los operativos de evacuación, rescate y recuperación de infraestructura.
El temporal dejó además miles de evacuados, severos anegamientos y cortes en el suministro eléctrico y de comunicaciones. Las fuerzas de seguridad y organismos de emergencia continúan desplegados en las zonas más afectadas.
