La presentación de una lista encabezada por Luciano Di Nápoli (jefe comunal de Santa Rosa) y Manuel Feito (Lonquimay) para renovar autoridades del Consejo Provincial del Partido Justicialista de La Pampa profundizó las tensiones internas y provocó la fractura del bloque de intendentes no alineados con Casa de Gobierno, que venía trabajando de forma coordinada de cara a las elecciones provinciales de 2027.
Hasta hace unas semanas, el grupo de jefes comunales que no respondían directamente al gobernador Sergio Ziliotto mantenía reuniones periódicas y se mostraba dispuesto a sostener una estrategia común rumbo al proceso electoral que definirá la candidatura a gobernador en 2027. Sin embargo, la jugada política de Di Nápoli, al lanzar una lista propia, junto a Manuel Feito, dinamitó esa posibilidad.
El gesto fue interpretado por varios de sus colegas como una ruptura unilateral del acuerdo tácito de unidad. Entre los más críticos -pudo saber Diario Textual– se encuentran la intendenta de General Pico, Fernanda Alonso, quien no sólo se mantuvo al margen de la nueva lista sino que además, en el departamento Maracó, la nómina de Di Nápoli ni siquiera logró reunir avales.
Otros intendentes que inicialmente participaron de las conversaciones del bloque no alineado, como Ariel Rojas (Toay) y Adriana García (Winifreda), también decidieron tomar distancia de la lista de Di Nápoli y terminaron respaldando la nómina de unidad promovida por el gobernador Ziliotto.
Así, el bloque de los no alineados quedó virtualmente partido en dos: por un lado, los que acompañan la iniciativa de Di Nápoli y Feito, y por el otro, quienes decidieron plegarse a la estructura oficial del PJ pampeano, privilegiando la cohesión partidaria en un contexto de definiciones clave.
La ruptura genera un nuevo escenario de cara a las internas y deja en evidencia las disputas latentes dentro del peronismo provincial, donde la puja por el liderazgo de cara a 2027 comienza a asomar con fuerza.
