La intendenta de General Pico, Fernanda Alonso, se refirió a la interna entre Sergio Ziliotto y Luciano di Nápoli y dijo que “falta diálogo” entre ambos dirigentes del peronismo. “Falta diálogo. No hay en este momento y tienen que hacerlo”, expresó Alonso.
La intendenta confirmó en una entrevista con Infopico Radio su participación en la reciente reunión de “intendentes no alineados” en Lonquimay, un encuentro que generó ruido por realizarse al margen de la convocatoria oficial del partido.
La dirigente vernista contó que mantiene una relación fluida con el exgobernador Carlos Verna, quien sigue siendo una figura influyente en su carrera política. “No me reúno, hablamos mucho por teléfono”, detalló.
En el plano provincial, el análisis de Alonso se adentró en las complejidades del justicialismo pampeano. Si bien calificó su relación con el gobernador Sergio Ziliotto como “excelente” y aseguró que el Concejo Deliberante local “acompaña” su gestión, reconoció que la unidad partidaria es una tarea en construcción. “Hay que trabajarla”, admitió al ser consultada sobre la cohesión dentro del peronismo.
En este intrincado tablero político, Alonso reveló que mantiene un canal de comunicación fluido y constante con el exgobernador Carlos Verna. “No me reúno, hablamos mucho por teléfono”, confesó. Describió una relación de mentoría, donde el experimentado líder político la aconseja e incluso la corrige. “Hablamos de lo cotidiano, desde la gestión, desde la visión nacional. Me aconseja siempre. ¿Si me reta? También, es su esencia”, detalló, dejando en evidencia la influencia que Verna aún ejerce en la política provincial y en su propia carrera.
Además, se mostró cautelosa sobre la posibilidad de una candidatura a la gobernación. Aunque evitó dar una respuesta definitiva, no descartó la idea de postularse en el futuro. “No sé”, fue su respuesta evasiva, aunque la posibilidad está latente para la sociedad pampeana.
Más allá de las aspiraciones personales, la intendenta destacó su preocupación por la apatía política en la sociedad. “Me quita el sueño hoy la participación de la gente en la política. Preocupa la no participación, la indiferencia, preocupa el odio”, reflexionó Alonso.
La jefa comunal piquense calificó su relación con el gobierno nacional como «cero» y explicó que las políticas nacionales tienen un impacto directo sobre las finanzas municipales, algo que ha complicado la gestión local. «En junio recibimos 400 millones de pesos menos de coparticipación, lo cual nos pegó un cachetazo importante», expresó Alonso. Aseguró que esta falta de previsibilidad complica la planificación y la posibilidad de llevar adelante nuevas obras, lo que genera una «nebulosa» sobre el futuro de las finanzas del municipio.
Un tema especialmente doloroso para la intendenta es el estancamiento de las 198 viviendas del Procrear en la avenida Isidoro Brunengo. «Es una pena lo que está pasando, es lamentable con la necesidad habitacional que tenemos, que no sea prioridad para el gobierno nacional», lamentó Alonso, refiriéndose a la falta de definición en torno a estas viviendas que siguen sin ser terminadas ni transferidas a la provincia.