La motosierra de Milei a la obra pública nacional hizo perder en lo que va de este año 1.800 puestos de trabajo en la construcción en La Pampa. A eso se suman 600 empleos menos por el freno de las obras privadas.
Los datos fueron revelados por el flamante secretario general de la Unión Obrera de la Construcción Seccional La Pampa, Diego Giménez, en declaraciones a CPEtv.
El titular del gremio de los albañiles comentó además que en la bolsa de trabajo de la Uocra hay 380 trabajadores en espera de poder conseguir un trabajo. Y alertó que ha crecido el empleo informal en el sector a raíz de la proliferación de las “changas” que tiene que hacer los obreros para sostener a sus familias.
Desde que asumió Milei se frenaron todas las obras nacionales en la provincia. Entre ellas, los barrios Procrear de Santa Rosa, General Pico y Toay, que en total suman casi 700 viviendas.
También se frenó el acueducto del río Colorado al norte y obras que se estaban ejecutando en los pueblos con financiamiento nacional.
Lo único que quedó en pie fue la obra pública provincial que, aunque a menor ritmo, sigue en marcha. Esto permitió mantener parte de los planteles de trabajadores de las empresas constructoras.
La construcción privada también se frenó. Por un lado los inversores dejaron en stand by los proyectos y por el otro las familias, afectadas por la baja de salarios y el aumento sideral del costo de vida, relegó cualquier inversión o emprendimiento.
