Las diputadas provinciales Gisela Cuadrado (UCR) y Noelia Viara (Pro-MID) presentaron en la Legislatura de La Pampa un proyecto de resolución que solicita al Poder Ejecutivo Provincial disponer controles obligatorios de alcoholemia y test de estupefacientes a los conductores de transporte de pasajeros antes del inicio de cada viaje.
La iniciativa surgió a partir de los hechos ocurridos recientemente en General Pico, donde un chofer que debía trasladar a un grupo de estudiantes hacia Mar del Plata dio positivo con 1,72 mg de alcohol en sangre. Gracias a la rápida intervención de las familias, Tránsito Municipal y la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT), se evitó una posible tragedia. “Este caso dejó en evidencia la necesidad urgente de reforzar los controles previos. Ningún colectivo con estudiantes, turistas o delegaciones institucionales debería salir sin un test de alcoholemia y de estupefacientes que garantice la seguridad de todos”, señalaron las legisladoras.
El proyecto recuerda que la CNRT cuenta con herramientas para fiscalizaciones anticipadas -que incluyen la posibilidad de realizar controles de alcohol y drogas-, pero su aplicación no es sistemática ni obligatoria, lo que deja un margen de riesgo evitable.
“No alcanza con que exista una norma nacional. Necesitamos que el control sea obligatorio, documentado y previo a la salida de cada colectivo. No puede depender de la voluntad de los padres o de un operativo fortuito”, expresó Gisela Cuadrado.
La propuesta hace especial hincapié en los contingentes estudiantiles, turísticos e institucionales, y apunta a que todo servicio de transporte de pasajeros en la provincia comience con un test negativo de alcoholemia y estupefacientes, reafirmando el principio de tolerancia cero para conductores profesionales.
“Cada viaje debe empezar con la tranquilidad de saber que quien conduce está en condiciones óptimas. Es una medida simple, preventiva y que salva vidas”, subrayó Noelia Viara.


