La Pampa dio un nuevo paso en el fortalecimiento del sistema público de salud con la presentación oficial del protocolo de atención del Programa Provincial ACV 365, una iniciativa que garantiza atención oportuna, continua y estandarizada ante el accidente cerebrovascular isquémico agudo, una de las principales causas de discapacidad y mortalidad a nivel mundial.
En ese marco, el ministro de Salud, Mario Kohan, explicó a la Agencia Provincial de Noticias que la Provincia se encuentra en condiciones de asistir a pacientes que sufren un evento cerebral isquémico agudo, con un abordaje diagnóstico-terapéutico unificado y con acceso a un fármaco específico, el tenecteplase, que permite salvar vidas y reducir secuelas.
Desde el inicio de su gestión, dijo el ministro, el gobernador Sergio Ziliotto definió a la salud pública como una prioridad. Bajo esa premisa se puso en marcha el Programa ACV 365, cuya implementación se apoya en una estrategia integral que articula los distintos niveles de atención, la capacitación permanente del personal, la inversión en tecnología, medicamentos e insumos, la ubicación estratégica de tomógrafos en hospitales clave y el uso sistemático de la telemedicina.
Emergencia tiempo-dependiente
Kohan recordó que en Argentina ocurre un ACV cada cuatro minutos y que el 85% de los casos es de origen isquémico. Se trata de la segunda causa de muerte en personas mayores y la primera causa de discapacidad adquirida permanente en adultos. Sin embargo, menos del 10% de los pacientes accede al tratamiento trombolítico dentro de la ventana terapéutica de 4,5 horas desde el inicio de los síntomas.
“Cada minuto sin tratamiento implica la pérdida de aproximadamente 1,9 millones de neuronas. Por eso afirmamos que se trata de una emergencia tiempo-dependiente que requiere atención inmediata”, sostuvo el funcionario.
Activación del Código ACV 365
El protocolo establece que el abordaje comienza en el primer nivel de atención, donde los equipos de salud, ante síntomas compatibles, aplican la Escala de Cincinnati para detectar signos neurológicos tempranos como asimetría facial, déficit motor o alteraciones del lenguaje. Frente a un resultado positivo, se activa de inmediato el Código ACV 365 y se dispone el traslado urgente al hospital con tomógrafo más cercano.
Los centros habilitados son el hospital de complejidad creciente René Favaloro de Santa Rosa, el Centro Asistencial Gobernador Centeno de General Pico, el Padre Buodo de General Acha, el Luisa P. de Pistarini de Victorica, el Jorge Ahuad de 25 de Mayo y el Virgilio Tedín Uriburu de Realicó, este último en coordinación con el subsector privado. Allí se realiza una tomografía computada de cerebro sin contraste para confirmar el diagnóstico.
Mediante la telemedicina, el equipo local se comunica con neurólogos que garantizan guardia permanente las 24 horas, los 365 días del año. Con la validación del especialista y el diagnóstico confirmado, se administra tenecteplase, un medicamento de alto costo recientemente incorporado al país, disponible en los hospitales mencionados. Su aplicación se realiza por vía intravenosa en un lapso breve, siempre dentro de la ventana terapéutica establecida.
Equidad y alcance territorial
El ministro subrayó que el Programa ACV 365 replica la lógica del Cardio 365, al garantizar atención inmediata y especializada en toda la provincia. “Fortalecemos la equidad dentro de la red sanitaria. Todos los pacientes reciben atención. Si no cuentan con cobertura, se hace cargo la Provincia; si poseen obra social o prepaga, se realiza el recupero correspondiente”, explicó.
Además, destacó que la estrategia resulta clave en un territorio extenso y de baja densidad poblacional, donde la telemedicina permite asegurar diagnóstico y tratamiento oportunos sin traslados innecesarios.
Prevención y reconocimiento precoz
El neurólogo Matías Köhler, integrante del Programa ACV 365, señaló que el accidente cerebrovascular es una patología de alta prevalencia, vinculada principalmente a enfermedades de las arterias. Identificó como principales factores de riesgo a la hipertensión arterial, la diabetes, la dislipemia y el tabaquismo.
“La prevención exige controlar estas enfermedades crónicas. Cuando el evento ocurre, lo central es reconocer los síntomas de aparición súbita y consultar de inmediato”, indicó. Entre las señales de alerta mencionó la caída de la comisura labial, la pérdida de fuerza en un lado del cuerpo y las dificultades repentinas para hablar o comprender.
Respecto del tratamiento, explicó que el trombolítico solo puede administrarse dentro de la ventana máxima de cuatro horas y media. “El tiempo es cerebro. Cada minuto perdido se traduce en menor calidad de vida”, remarcó.
Telemedicina como pilar estratégico
Köhler afirmó que el Programa ACV 365 representa “un salto de calidad en la salud pampeana”, sustentado en la telemedicina, la inversión estatal, la conectividad territorial y la formación continua de los equipos. “Esta herramienta permite trabajar en red y garantizar respuestas rápidas en cualquier localidad”, señaló.
“Con este esquema, La Pampa se posiciona en la primera línea nacional en el abordaje del ACV isquémico, al combinar evidencia científica, decisión política y tecnología para salvar vidas y reducir secuelas”, dijo.
