El Ministerio de la Producción informó que se confirmaron dos casos de carbunclo bacteridiano en bovinos en establecimientos rurales de Alpachiri y Quehué, registrados los días 22 y 23 de diciembre. La confirmación fue realizada por el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), lo que activó el refuerzo de las acciones de vigilancia sanitaria en la zona.
Desde la Mesa Provincial de Zoonosis indicaron que, ante la detección de los focos, se intensificaron las tareas de control y se reiteró la importancia de la vacunación anual de los animales susceptibles como principal herramienta preventiva.
El carbunclo bacteridiano es una enfermedad zoonótica grave que afecta principalmente a rumiantes domésticos, como bovinos y ovinos, y puede transmitirse a las personas por contacto con animales enfermos o muertos. En los animales suele manifestarse mediante muerte súbita, con presencia de sangre sin coagular por orificios naturales.
La enfermedad es causada por la bacteria Bacillus anthracis, cuyas esporas pueden permanecer activas en el ambiente durante largos períodos, lo que obliga a sostener medidas preventivas permanentes en los sistemas productivos.
La subdirectora de Producción Animal y Zoonosis, Laura Martínez, señaló que la vacunación animal es una herramienta estratégica, eficaz y de bajo costo, y advirtió que no existe vacuna para humanos, por lo que la prevención en el ámbito rural resulta clave para proteger la salud pública.
Además, se recordó a productores y trabajadores rurales que no deben manipular animales muertos, ni retirar cueros, ni alimentar a perros u otros animales con restos de ejemplares enfermos, ni quemar los cadáveres. La disposición final debe realizarse conforme a las indicaciones del Senasa. Martínez remarcó que la detección temprana y la notificación inmediata de casos sospechosos permiten implementar acciones de control oportunas y resguardar la salud animal, humana y la producción agropecuaria.


