Patricia Henríquez, una enfermera de 29 años, murió este sábado en una clínica de Santiago de Chile por una complicación cardiopulmonar originada por el hantavirus. Días atrás habría estado en contacto con alguien de Epuyén, Chubut.
Henríquez había manifestado los síntomas del hantavirus cuando estaba en la comuna de Palena, Chile, a unos 250 kilómetros de Epuyén. Con su muerte suman 10 las víctimas fatales del brote.
La muerte fue confirmada por un médico de la unidad de Epidemiología de la Seremi de Salud de Los Lagos, José Antonio Vergara, informó el sitio chileno El Huemul.
Ayer, por un pedido del ministro de Salud de Chubut, Adrián Pizzi, la Justicia ordenó a 85 vecinos de Epuyén que hagan un aislamiento obligatorio durante un período de 30 días. El juez penal de Esquel, Martín Zachino, tomó la decisión ante la negativa de algunos vecinos de no hacer el aislamiento, pese a haber estado en contacto prolongado con personas afectadas. «Es la única manera de parar el brote», había dicho el ministro.
El hantavirus es una enfermedad viral grave causada por el virus hanta que ataca los pulmones. Lo transmiten los ratones silvestres (colilargos) que eliminan el virus a través de la saliva, las heces y la orina. Al secarse, el polvo del lugar lo transporta por el aire. El contagio se produce al inhalar ese aire, pero también por mordedura, al tocar roedores infectados vivos o muertos o entre personas, durante el período de los síntomas.