Una mujer embarazada permaneció durante seis horas en el techo de una vivienda social del barrio Santa María, en Santa Rosa. Estuvo reclamando que para que se la devuelvan. «Esta casa es mía», dijo.
La mujer ingresó antes de las 12 al patio de la vivienda, ubicada en Provincialista al 300, junto a dos hijos. Posteriormente, a las 14 horas, se subió al techo. Recién bajó a las 20 horas. Lo hizo luego de que le prometieran solucionar su reclamo el día lunes.
La mujer, Irma Santillán, hace 4 años reclama en la Justicia civil por la vivienda.
La fiscal penal Cecilia Molinari llegó alrededor de las 17 horas e inició una larga negociación. Lo hizo pese a que no era de su competencia: el caso debe resolverlo la Justicia civil, en conjunto con el Instituto Provincial Autárquico de Viviendas (Ipav).
Irma cedió la casa a otra señora, que nunca se la devolvió. Contó que la había entregado, luego de que fuera amenazada por otra familia de la misma cuadra. «Me quemaron el auto de un hermano y la familia recibió amenazas. Por edo yo me fui a una quinta, que me prestaron», dijo a Diario Textual. «En el Ipav, incluso, firmé un documento de ‘permuta a futuro’ por otra vivienda. El Ipav le iba a dar la casa a esta señora y a mi otra vivienda. Pero ‘saltó’ que esta señora tenía otra vivienda en Rancul. Entonces a mi nunca me dieron otra vivienda y la señora a la que yo le había cedido la casa, nunca me la devolvió», dijo.
Hubo momentos de tensión: a las 17.45, Irma comenzó a golpear el techo de la casa y amenazó con arrojarse desde unoz tres metros de altura. «Andate de acá», gritó en reiteradas oportunidades a la ocupante de la casa.
Finalmente, luego de la intervención de periodistas y policías, se logró el compromiso del Ipav de recibirla el lunes. Ese organismo analizaría la posibilidad de darle otra casa a la actual ocupante: así Irma podría regresar al Santa María. La mujer finalmente se bajó del techo a las 20 horas.
