Un autoservicio de Santa Rosa fue víctima de un colapso cloacal, de los tantos que ocurren a diario en la capital provincial. La obstrucción del sistema inundó de líquidos cloacales el comercio y generó cuantiosas pérdidas económicas en equipamiento y mercadería, estimada en 300 mil pesos. «Señor Leandro Altolaguirre, ¿Quién se va a hacer cargo?», preguntó el propietario. El municipio culpó a un lavadero.
“Domingo para el olvido…y teléfono para el señor intendente”, posteó en su Facebook Fabio Sosa, propietario del autoservicio El Puesto, ubicado en Alem y Garibaldi.
El comerciante explicó que a las 12 del mediodía lo alertó su vecina que del interior de su negocio estaba saliendo agua y desechos cloacales.
“Tremenda angustia cuando llegó al lugar, donde hace 7 años nos decidimos con mi familia a emprender una pequeña Pyme y hoy nos encontramos con la problemática de la que todo ciudadano de nuestra Santa Rosa está pasando”, contó Sosa.
“Se nos inundó nuestro local comercial con desechos cloacales y materia fecal. Pero eso no es todo, tenemos un sótano que también se inundó con más de un metro de los mismos desechos y también en la cámara frigorífica que poseemos desbordada de agua y el salón comercial totalmente lleno de agua y desechos”, relató.
“Como de costumbre nadie atiende los reclamos y los teléfonos de guardia de Dagsa están desconectados. Por eso no me quedó otra opción que recurrir a mi abogado y escribano, para que constaten las pérdidas que estábamos teniendo: tres freezers que estaban en el sótano quemados, repletos de carne vacuna, totalmente llenos de agua de las cloacas, cientos de kilos de carne de la cámara frigorífica también alcanzados por el agua de las cloacas, un freezer de helados de la empresa Arcor se quemó y se perdió toda la mercadería del mismo al perder la cadena de frío”.
El comerciante dijo que el camión desobstructor de Dagsa recién llegó a las 14.30 horas (dos horas y media después de detectado el inconveniente.
“En 20 minutos lograron destapar el tapón de la esquina, pero para esto ya habíamos perdido ciento de miles de pesos en mercadería y equipamientos que tanto nos costó”, lamentó.
“Ahora señor Leandro Altolaguirre seguramente usted estaría disfrutando de un domingo en familia mientras yo veía como tirábamos junto a mis vecinos y amigos que se hicieron presente cientos de pesos en mercadería afectada por el agua de las cloacas. Quisiera que me diga cómo hago para recuperarme y quién se va a hacer cargo de toda la pérdida que tal desastre (que se podría haber evitado con las obras correspondientes ) ocasionó”, preguntó el comerciante.
La municipalidad de Santa Rosa culpó a un lavadero de autos por el colapso cloacal que arruinó el autoservicio.
A través de la Dirección de Agua y Saneamiento, emitió el siguiente comunicado tras el incidente: «Pasado el mediodía personal de la guardia concurrió a un reclamo por desborde cloacal en Alem y Garibaldi. Se pudo constatar que el taponamiento se produjo por la gran cantidad de arena sedimentada en la cámara de registro y en la cañería, la cual provendría de un lavadero próximo. También se solicitó la asistencia de un equipo atmosférico para vaciar un sótano que se vio afectado».