No tendría nada de espontáneo ni de genuino, pero lo parece. La estrategia comunicacional de la Casa Rosada, aceitadísima como ninguna otra, hizo pie en La Pampa con todo: el mismísimo presidente Mauricio Macri le envió en la mañana de este miércoles 24 un breve mensaje por Whatsapp a uno de los dueños de la empresa de casillas El Imán, de la localidad norteña de Alta Italia. En minutos, ese audio se viralizó en la provincia. También, la respuesta de Matías Prat, el encargado de la gerencia de la firma.
“Hola Matías. Soy Mauricio Macri. Felicitarte a vos y tu familia por apostar al crecimiento de pueblo y desearles éxito para cuando empiecen a exportar. Un abrazo grande para todos los trabajadores. Vamos a llenar de casillas el sector petrolero”, dice el jefe de Estado en ese mensaje.
El audio fue replicado por los contactos del empresario y, en minutos, también por dirigentes del macrismo y el radicalismo pampeano.
Matías Prat le respondió por el mismo medio. «Mauricio… Buenos días, ¿cómo le va presidente? La verdad que no todas las mañanas se recibe un mensaje del presidente de la nación. Cuando lo vi en la pantalla de mi celular, la verdad que quedé shockeado», dijo. «Le agradezco muchísimo en nombre mío y en nombre de toda mi familia que compone el grupo familiar de la empresa casillas El Imán. Le agradecemos mucho el saludo, su apoyo y esperemos que todas las cosas funcionen de acá para adelante y vamos a trabajar para que eso suceda. Le deseamos toda la suerte del mundo y todo el apoyo necesario de parte nuestra. Estamos muy orgullosos de fabricar lo que fabricamos y de poder exportarlo a otros países desde acá desde nuestro pueblo, Alta Italia La Pampa, y con la gente que tenemos justamente ocupada».
El «detrás» de este mensaje
Este parece un saludo más. Pero es uno de los cerca de 30 mensajes que Macri envía, por día, a diferentes empresarios y referentes de instituciones de diferentes puntos del país.
Todo tiene un detrás. En el caso de La Pampa, la pareja de Matías Prat es Celina Rivas. Es una activa militante e incluso funcionaria de Cambiemos: está a cargo de la Oficina del Pami en Realicó.
Por fuera del radar de los medios tradicionales
Macri, por fuera del radar de los medios tradicionales, empezó hace más de dos meses la campaña de microsegmentación en WhatsApp. Audios, selfies y textos son enviados todos los días por el presidente de forma personalizada a destinatarios elegidos estratégicamente por el comando electoral de Juntos por el Cambio. Cuando le contestan, según el Gobierno, es él mismo quien vuelve a responder, publicó hace unos días el sitio web LetraP.
«El objetivo es generar conversaciones en segmentos específicos de la sociedad sobre sus temas de interés», explicó un funcionario de trato cotidiano con Marcos Peña. «La idea es que ellos reenvíen los mensajes a sus grupos y que también los hagan públicos. Son un contenido fácil de viralizar», agregó. Hasta el mes pasado, Macri mantenía por lo menos quince de estos chats por día pero durante la campaña ese número se va a, por lo menos, duplicar. El equipo dirigido por Peña es el encargado de seleccionar a estas personalidades neurálgicas mediante el cruce de sus bases de datos. Es una apuesta al mismo recurso que utilizó Jaír Bolsonaro en su meteórica campaña para convertirse en el actual presidente de Brasil.
“Primero se elige a alguien que tenga su propia red de contactos dentro de la parte de la población a la cual se quiere apuntar”, explicaron desde el equipo comunicacional del oficialismo. “Entonces, Mauricio le graba un audio donde le agradece por lo que hace día a día, le cuenta cómo la gestión de este gobierno benefició a su sector y le explica las medidas concretas que se van a tomar en el futuro para facilitar su trabajo y su vida cotidiana”.
No es la primera vez que se ponen en circulación mensajes de candidatos como contenido para que se reenvíe de manera genuina. El oficialismo lo ensayó en campañas municipales como la del diputado nacional del PRO Martín Maquieyra para disputar la intendencia de General Pico durante mayo de este año. “Le dimos el teléfono de Martín a toda la ciudad”, recordó alguien que trabajó codo a codo con Maquieyra en ese proceso. “A medida que le mandaban mensajes con consultas, él las iba contestando y muchas de esas respuestas circularon bastante en grupos diversos”. Ahora, lo novedoso es la forma de elegir a los destinatarios, la llamada microsegmentación.
El uso de Whatsapp como herramienta comunicacional se sumó a los llamados a vecinos y a la difusión tradicional en medios y redes sociales. Se intenta llegar al votante indeciso con contenido orgánico y espontáneo.