Hace unos días, un rayo fulminó 22 vacas de una cabaña en el pueblo de Quehué. En las últimas horas, murieron 29 vacas de otra cabaña en la localidad de Anguil: la Chañar Chico, de Aldo Teso. ¿Cómo es que murieron? «Se intoxicaron con sorgo de alepo», dijo Teso en diálogo con Diario Textual. Hay, además, más casos en campos de los departamentos Toay, Conhelo, Atreucó y Catriló.
“Hoy nos tocó a nosotros. Perdimos 29 madres del plantel PP”, dijo. “Es uno de esos dolores que no se empardan porque muchos proyectos se esfuman”.
“Este tipo de cosas son las que no entienden quienes creen que el campo es solo cargar animales y cobrar”, finalizó.
Hay más casos, según el INTA Anguil
Según estudios de investigadores del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), los rumiantes pueden intoxicarse con plantas acumuladoras de nitratos. Es lo que, eventualmente, suele ocurrir con el sorgo de alepo.
El INTA Anguil, luego de la publicación de Diario Textual, dijo que hay casos en toda la zona. «En las condiciones de sequía prolongada primavero-estival que se están registrando en toda la región, y en particular en la franja central de la provincia de La Pampa (Departamentos Toay, Capital, Conhelo, Atreuco y Catriló), se han presentado casos de intoxicación y consiguiente mortandad de bovinos que están pastoreando en potreros con presencia de sorgo de Alepo. Este problema también puede llegar manifestarse, ante esta misma situación de extrema sequía, en otras especies forrajeras de verano (sorgo y maíz) e incluso de invierno (trigo, cebada, avena)», sostuvo.
Por qué ocurre
«Una amplia variedad de especies forrajeras y malezas tienen la capacidad de acumular nitratos. Sin embargo, la acumulación de este compuesto a niveles potencialmente tóxicos es ocasional porque depende de la acción sincronizada de un conjunto de variables entre las que el tipo de planta, las condiciones ambientales, la fertilidad del suelo y el estado fenológico del forraje juegan un rol importante», ha dicho en sus estudios Gustavo Bretschneider, Eloy Salado y Juan Mattera (INTA, Estación Experimental Agropecuaria Rafaela, Santa Fe).
¿Por qué se acumulan los nitratos? Las condiciones bajo las cuales estas plantas acumulan altos niveles de nitrato no son muy bien entendidas, sostienen esos profesionales. Sin embargo, es conocido que las plantas necesitan crecer en suelos relativamente ricos en nitrato para acumular este compuesto en niveles potencialmente tóxicos. Por otro lado, suelos ricos en nitrato no producen, en sí mismos, plantas tóxicas. Esto se debe a que factores ambientales que retardan el crecimiento de las plantas, como por ejemplo las sequías y las heladas, son necesarios, en combinación con suelos ricos en nitratos, para generar plantas con potencial tóxico.
¿Cuándo es la planta más tóxica y dónde se acumulan principalmente los nitratos? En general, el contenido de nitrato en una planta disminuye con su madurez, por lo tanto, una planta joven tiene más probabilidades de producir toxicidad. Asimismo, el tallo es el lugar de la planta donde se encuentra la mayor concentración de este compuesto.
¿Cómo se produce la toxicidad y cuáles son sus signos? Una vez en el rumen, los nitratos se transforman en nitritos y se absorben como tales. En el torrente sanguíneo se unen a la hemoglobina transformándola en metahemoglobina, la cual no tiene capacidad de fijar oxígeno y la muerte del animal ocurre por asfixia. Los signos de intoxicación y la rapidez con que éstos aparecen dependen de la concentración de nitratos en la dieta. En intoxicaciones agudas (primeras horas post consumo) se puede percibir dificultad para respirar, nerviosismo, temblores musculares, debilidad y convulsiones que ocasionan la muerte del animal. Cuando la concentración de nitratos no es suficientemente alta para inducir la muerte, se puede observar un cuadro crónico caracterizado por menor producción de leche o ganancia de peso, abortos e infertilidad.
¿Qué se puede hacer para reducir la probabilidad de intoxicación? El manejo de los forrajes sospechados de tener alto nivel de nitratos no es simple.
▪ Se recomienda realizar ensilados de los forrajes. Esta técnica reduce los nitratos hasta en un 50 % . Sin embargo, el oreo y la henificación no disminuyen la toxicidad de las plantas.
▪ Contactar al veterinario ante la sospecha de que el forraje a pastorear es potencialmente tóxico.
▪ No pastorear un forraje sospechoso de ser tóxico con animales en ayuno, “hambreados”.
▪ Evitar el sobrepastoreo como una forma de reducir el consumo de la parte más baja de los tallos, donde se encuentra la mayor concentración de nitratos.
Un rayo mató 22 vacas de una de las mejores cabañas de La Pampa