Los $3.450 que les cobraron por una picada para cuatro, dos limonadas, un chopp y un fernet en un bar de Villa Carlos Paz hicieron reaccionar en las redes sociales a un grupo de amigos que hizo la consumición. En paralelo, se produjo la aclaración de la Asociación Hotelera y Gastronómica de Carlos Paz de que es «un hecho puntual» y que «para nada refleja los precios de la villa» turística.
La polémica se generó cuando los amigos posteraron en las redes el ticket que les dieron en el bar y se quejaron por los precios. María José Nieto, una de las participantes, contó al diario La Nación que en el lugar no pudieron consultar la carta -pese a que la pidieron- porque no había. Hicieron el pedido sin saber los precios y cuando fueron a pagar se encontraron con que eran $3450.
En el ticket aparece que la picada cuesta $2050; el «trago», $500; el chop, $300 y «varios por dos», $600. El bar está sobre la avenida principal de la villa, cerca del Teatro Coral, a donde fueron después de la picada.
«Decidimos comer algo rápido, una picada. Eran platitos de café con jamón, queso, aceitunas, maní y algo más de papas fritas -describe-. Cometimos el error de no insistir, supusimos que saldría algo más que en la ciudad de Córdoba pero no esta barbaridad. Sabemos que en Carlos Paz hay muchísimos lugares que trabajan muy bien y con otros precios; la idea no es criticar a la villa a la que amo y recomiendo. Es advertir que no hay que estar tan relajados, que hay que prestar más atención», dijo.
Insistió en que ellos mismos conocen otros lugares donde una picada casi para cenar sale $900. «Pero bueno nunca pensamos que se avivarían así. No está bueno porque la gente viene a pasarla bien, a llevarse una buena experiencia y hay otros espacios que están buenísimos», dijo.
Leonardo González , presidente de la Asociación Hotelera y Gastronómica, enfatizó que la del bar apuntado «no es la situación que se está dando» en la ciudad. «Fue un caso muy muy puntual; los precios no son esos. Estamos hablando de un comercio, acotemos el tema. Hay lugares hermosos, con gente que vende con precios óptimos y se esfuerza por hacerlo. Venimos desde octubre preparando la temporada. La Municipalidad deberá controlar que no haya habido una carta controlable», dijo.
