La Confederación General Empresaria (Cgera) propuso la adopción de cinco medidas orientadas a “reactivar la producción” y fundamentalmente “evitar que se corte la cadena de pagos” ante la situación adversa generada por la pandemia del coronavirus.
Una de las propuestas es que las entidades financieras actúen como banca de crédito y cubran los cheques de aquellos clientes que siempre han cumplido para que se acrediten en las cuentas que lo depositaron.
También pidieron el otorgamiento de un plazo lógico por estas deudas con baja tasa de interés tomando como referencia el 24% que ofrece el Gobierno, y que el Banco Central, de ser necesario modifique normativas, para que los bancos no tengan dificultades para facilitar la operatoria mencionada.
Además, Cgera sugirió reperfilar las deudas de las pymes con las entidades financieras y que el Estado destine fondos para que no se corte la cadena de pagos bajo ningún concepto.
La confederación pyme remarcó que los tres eslabones que sufren la inactividad económica son en primer lugar el comercio que compró mercaderías antes del 19 de marzo y emitió cheques para fechas posteriores con la imposibilidad de cubrir los valores en esta situación.
En segundo término se encuentra el distribuidor mayorista o la industria pyme, que tendrán gran cantidad de estos cheques en cartera o entregados a la entidad financiera en forma anticipada, con el riesgo de que sean rechazados.
En tanto, el último eslabón es la mediana o gran empresa proveedora de los anteriores, que tiene en su poder o entregados gran parte de estos cheques, o directos de las entidades financieras, que de ser rechazados generarán gran conflicto.