La Fundación Chadileuvú rechazó los “carguitos” que ofrecería Mendoza en la reunión del Consejo de Gobierno de Coirco para que las provincias de La Pampa, Neuquén, Río Negro y Buenos Aires controlen y fiscalicen la correcta administración del agua en la represa Portezuelo del Viento.
Portezuelo: Mendoza propondría que La Pampa tenga un delegado para fiscalizar la represa
“El sueño de un gran dique que les permita trasvasar aguas del río Grande al Atuel ha enceguecido a la dirigencia mendocina. La ilusión de hacer con el Colorado lo que hicieron con el Atuel y el Desaguadero se está desvaneciendo. Ya no somos la indefensa Gobernación de La Pampa minusválida por no ser provincia, hoy los pampeanos nos hemos plantado en defensa de nuestros derechos en el río y por nuestro futuro. No estamos solos, también se han despertado otros gobiernos provinciales, Buenos Aires, Río Negro y Neuquén”, sostuvo la Fuchad.
“No se trata, como piensan en Mendoza que nos van a arreglar con unos carguitos para verificar el funcionamiento del dique, se trata de que el dique no termine de destruir un río muy afectado por la falta de agua en su cauce”, remarcó la organización no gubernamental.
“Esa es la ignorancia del gobierno provincial mendocino, no reconocen la gravísima crisis hídrica del río Colorado, no conocen que es el agua de consumo humano de 200.000 personas, y en un futuro cercano de casi 700.000 habitantes de las provincias de aguas abajo. Tampoco conocen que existen más de 170.000 hectáreas en producción que están en crisis por falta de
agua”, señaló.
“El estudio de impacto ambiental hecho a la medida de los intereses mendocinos es inválido porque no se ajusta a la normativa legal vigente. Es también inválido porque no considera el estado actual del río. El Colorado ya no lleva los casi 150 metros cúbicos por segundo, hoy solo corre por su cauce menos de la mitad del agua que antaño”, alertó la Fuchad.
“Un nuevo estudio de impacto ambiental se impone. Dicho trabajo debe realizarse abarcando a toda la cuenca, debe tener en cuenta la realidad crítica actual del río. Un tema fundamental es proponer al COIRCO un nuevo estudio integral del río que permita revisar el actual tratado, que considere las futuras obras a realizar, que tome en cuenta el creciente uso del agua para bebida humana y animal, que establezca nuevos cupos de uso para cada provincia y los sistemas de riego a utilizar. Los viejos estudios de la década del 70 que dieron origen al Tratado del Colorado ya están obsoletos”, afirmó.
“El río Colorado es de las cinco provincias, pero también de algún modo es de todo el país. El interés provincial y nacional es defender los recursos naturales para que nos sirvan a todos. Cuando los pampeanos pensamos en el Colorado también pensamos en las otras provincias y en el país como la unidad que nos contiene a todos. Un país se construye y se defiende con la solidaridad de todas las provincias y no con el egoísmo que los gobernantes mendocinos siempre han demostrado con los ríos interprovinciales”, concluyó el documento de la Fuchad.