El periodista y escritor realiquense Luis Matías González presenta este viernes 10, desde las 21 horas, parte de sus creaciones en un evento en el que compartirá escenario con el reconocido músico cordobés Germán Palacios. Se trata del espectáculo «10 historias entre el Cielo y el Infierno», que se presentará en el auditorio del Centro Cultural y de Convenciones de Realicó, con la producción de 360 Consultora de Comunicación.
«Se trata una historia armada con diez cuentos cortos que escribí para este espectáculo algunas y otras que ya fueron publicadas en el diario La Reforma, en el diario digital cultural El Lobo Estepario, en el diario digital Impacto Informativo o en otros medios y que pudieron suceder en Realicó o en cualquier sitio del universo, donde hablo de los sentimientos que nos abarcan a todos, a cada una de las personas que los lee o que irá ahora a escucharlos», dice.
«Todos estarán ilustrados con la tremenda voz de Germán Palacios, que interpretará temas de Lisandro Aristimuño, Silvio Rodríguez, Fito Páez, Joan Manuel Serrat, entre otros», agrega.
González se desempeña periodísticamente desde hace muchos años junto a su padre Américo en el diario La Reforma. Y escribe todos los fines de semana sus cuentos o columnas en esas páginas.
Eligió el periodismo desde muy chico, con el medio familiar FM Impacto e Impacto Informativo. «En el espectáculo buscamos una interrelación entre la palabra y lo que surja de la guitarra y la voz de Germán Palacios, músico cordobés radicado en Rancul pero nacido en Obispo Trejo y va a tener muchas sorpresas», expresa.
«Se debe leer para crecer y en la diversidad de los textos encontrar las palabras o las ideas, apoyados en los mas grandes», dice. Entre ellos, elige a filósofos como Friedrich Nietzsche, a los argentinos Jorge Luis Borges, Julio Cortázar y a su admirado Alejandro Dolina, con quien también comparte la pasión por la radio.
En su programa radial matutino intercala siempre textos literarios, apoyándose en el modo de comunicar en estilos de grandes como Antonio Carrizo. Luis no duda. «La lectura está mal enfocada, porque la escuela atrasa mil años y los chicos leen por obligación», sostiene. «La lectura es un goce, las pibas y los pibes no saben que la lectura es un goce».
