River lo hizo: a nueve minutos del final, estaba 0-2 en la serie y Gremio manejaba los tiempos del partido. Pero no claudicó. Se puso a tiro de la clasificación gracias al cabezazo de Rafael Santos Borré y, con el penal ejecutado por Gonzalo Martínez (correctamente sancionado por Andrés Cunha a instancias del VAR), ganó 2-1 y logró la hazaña de volver a disputar la final de la Copa Libertadores, como sucedió en 2015 (terminó consagrándose campeón).
Ahora enfrentará al ganador de Palmeiras y Boca, que juegan este miércoles. El xeneize venció en la ida 2 a 0.
De penal, en tiempo de descuento y con toda la calidad. ¡El Pity Martínez! 🤪#LaFuerzaDelMasGrande #VamosRiver ⚪️🔴⚪️pic.twitter.com/yW4YG9PWHV
— River Plate (@CARPoficial) 31 de octubre de 2018