El presidente Mauricio Macri admitió que 2018 fue un año «muy duro», dijo que la pobreza sigue siendo su «prioridad» y, «sin hacer pronósticos», confió en que en 2019 baje la inflación y haya crecimiento. “Pero en 3 años no se puede salir de una fiesta de 70 años», lanzó.
“Los argentinos crecimos, porque aprendimos y comprendimos que de setenta años de fiesta no se sale en tres», insistió.
“Por primera vez pasamos esa tormenta y no tiramos todo por la borda, sino que nos agarramos al timón, mantuvimos el rumbo y vamos a cumplir», expresó.