El Gobierno nacional prepara un plan para lograr la recuperación del sector automotriz, cuyas ventas se desploman mes a mes. Las medidas serían bonificaciones, reducción de impuestos y hasta tasas subsidiadas para la toma de créditos, entre otras opciones.
El plan de subsidios, que significará un aporte del Gobierno a las automotrices de $1.000 millones, permitirá más bonificaciones para unidades nuevas, acumulable con rebajas que ya ofrecen terminales y concesionarias.
El subsidio o Aporte No Reembolsable (ANR) sólo se hará efectivo para aquellas operaciones en las cuales el precio de venta efectivo del vehículo sea igual o menor al precio de lista sugerido al público informado por cada terminal y las bonificaciones que las terminales y concesionarias otorguen por el programa.
Las terminales deberán difundir el plan de promociones y las operaciones que se realicen en el marco del programa no podrán incorporar cargos extras. La medida establece una promoción a ventas en concesionarios oficiales o terminales excluidas de operaciones de Plan de Ahorro.
Una de las ideas en debate es otorgar una bonificación compartida donde el Gobierno aportaría el 40% del total. Sería de un total de $50.000 para autos cuyo precio de mercado esté por debajo de los $750.000 y de $100.000 para los que superen los $750.000.