La Policía pampeana multó y le retuvo el automóvil al diputado provincial Espartaco Marín (Frejupa, peronismo), por conducir en forma antirreglamentaria: en un alcohotest, se detectó que manejaba con 1,24 gramos del alcohol por litro de sangre, más de dos veces lo permitido por la legislación, según documentación a la que accedió Diario Textual.
«Taco» había participado de una reunión de amigos en un campo. Ya a la vuelta, a las 2.40 horas del lunes 15, personal policial intentó frenarlo en el cruce de las rutas 35 y 12 -al norte de Santa Rosa, cerca de la Escuela Agrotécnica-.
Según pudo saber Diario Textual, el «conductor hizo caso omiso” al pedido para que se detenga pero fue retenido más adelante por otra patrulla de la Policía.
Marín y la multa: «Estoy arrepentido por lo sucedido»
El conductor «manifestaba insistentemente que lo dejaran ir”, “presentaba aliento etílico y dificultad en el habla, por lo cual personal de Seguridad Rural solicitó que se le haga un alcotest» en el lugar. Así, llegó un patrullero de Accidentología. Arrojó 1,24 gramos por litro, es decir, más del doble de lo permitido.
Allí le labraron un acta de comprobación, con retención del vehículo, que fue trasladado en grúa policial. Espartaco, en tanto, se retiró del lugar junto a familiares que fueron al lugar.
La Ley Nacional de Tránsito y su reglamentación establecen un límite de tolerancia máximo de alcohol en sangre de 0,5 g por litro. ¿Qué significa un límite máximo del 0,5? No es un límite cuantitativo, igual para todos, sino que varía en cada persona, según diversas circunstancias personales y, en especial, según el peso y el sexo. También otros factores -tales como el cansancio, la ingestión de ciertos medicamentos y enfermedades-pueden potenciar los efectos tóxicos, por lo cual en realidad resulta muy difícil decir, con exactitud, si un vaso de bebida alcohólica, en un determinado ser humano y en un momento preciso, lo hará superar o no el límite legalmente tolerado.
Hace un par de años ya le habían secuestrado el mismo auto a Marín hijo. Fue durante un control en la esquina de Quintana y Pico, en Santa Rosa. Los inspectores le cortaron el paso a un VW Vento que luego del silbato se estacionó unos metros más adelante. Sin embargo, antes de que llegaran las autoridades de la Dirección de Tránsito el conductor, a quien identificaron como “flaco y alto”, se bajó repentinamente y escapó corriendo. Marín, posteriormente, retiró el auto y aseguró que él no estaba en la capital: dijo que el conductor era un amigo.