El secretario del comité de pediatría social de la Sociedad Argentina de Pediatría, Claudio Pedra, reveló en Radio Textual (FM Sonar 97.9) resultados de una encuesta nacional sobre las consecuencias de la cuarentena por el covid en niños y niñas. Dio, entre otros números, que el 68% manifestó tristeza y advirtió que para retomar la vida normal y la escuela deberá instrumentarse un espacio de “revinculación social” para escucharlos.
Pedra explicó que se recogieron datos de 4.562 niños, niñas y adolescentes de entre 6 y 18 años en todas las provincias y se están sistematizando los resultados. Sostuvo que esta encuesta será una herramienta fundamental para el inicio del ciclo lectivo 2021.
“Indagamos sentimientos y percepciones, no situación socioeconómica. Es decir, les preguntamos qué les sucedió a ellos y ellas. Llegamos a través de los pediatras afiliados a la Sociedad Argentina de Pediatría, que tiene 20 mil socios en todo el país”, explicó.
“Un 77% de los niñas y niñas manifestó estar enojados por algo, y ese algo lo manifestaron por tener que estar privados de su libertad y extrañando la vida que hacían antes de la cuarentena”, reveló.
“Los más chicos, de 6 a 9 años, manifestaron en gran medida extrañar a sus abuelos, a sus amigos de la escuela y del club, a las actividades físicas y deportivas extracurriculares”, comentó Pedra.
“El 68% manifestó tristeza por el hecho de añorar la libertad que tenían antes”, advirtió, y remarcó que otro porcentaje importante expresó “temor, ya sea por enfermarse ellos o familiares directos”.
Esta situación, dijo Pedra, hace que “los chicos y chicas no van a poder retomar las clases como si no hubiese pasado nada. En la escuela va a tener que haber un momento de revinculación social, espacios de escucha para los chicos. Esto debe ir en simultáneo con el proceso de aprendizaje”, reclamó.
“Este proceso de revinculación social deberá ser simultáneo con el proceso de aprendizaje porque los chicos y chicas tienen necesidad de contar esto que les pasó”, indicó.
Comentó que otro de los cambios en la vida de los más chicos fue que “para el 70% la pantalla (de la computadora) pasó a ser un espacio de aprendizaje y obligación en lugar de una diversión y la mayoría de ellos dijo extrañar las actividades al aire libre. Es decir, contrariamente a lo que uno podía pensar, la pantalla dejó de ser un espacio adictivo”.